Todos los mexicanos sabemos que el 16 de septiembre se conmemora la Independencia de México con el ‘Grito de Dolores’ que encabezó Miguel Hidalgo y Costilla en 1810. En casi todos los países del mundo que tuvieron un proceso de Independencia suelen poner más atención en el inicio que en la consumación, porque el primero se asocia más con el heroísmo.
La consumación en cambio muchas veces pasa a segundo plano. Para lograr la Independencia de México tuvieron que pasar 11 años. Esta se realizó cuando el Ejército de las Tres Garantías entró a la capital mexicana el 27 de septiembre de 1821. Era “trigarante” porque garantizaba tres principios: la religión, la unión y la independencia.
Este ejército independentista fue liderado por Agustín de Iturbide. Pero ¿cuándo se debe celebrar la consumación, si esta se dio hasta el día siguiente con la firma de un documento?
Entre 1820 y 1821 había diversos grupos que a pesar de sus diferencias estaban de acuerdo en que la independencia era algo bueno para la Nueva España. Entre estos grupos estaban los conservadores, gente de la Iglesia o de la alta burocracia del virreinato que temían que el nuevo régimen constitucional en España les quitara privilegios.
Otros grupos, llamados autonomistas, querían más autogobierno para México. También estaban presentes grupos herederos de la insurgencia como Vicente Guerrero y Guadalupe Victoria que llevaban una década peleando por la independencia. Integrantes de estos y otros grupos trabajaban y actuaban a favor de la emancipación tanto en la Nueva España como desde España.
Agustín de Iturbide fue un jefe militar realista. En los primeros años de la lucha por la independencia él estaba en contra de las revueltas y a favor de la propiedad privada y los privilegios que tenían los militares. Sin embargo, años más adelante Iturbide también quería la independencia de México.
Durante la guerra de Independencia había batallas y enfrentamientos, pero también correspondencia entre los bandos. No era raro que los jefes militares tanto de los ejércitos realistas como de los insurgentes se enviaran cartas invitando a sus oponentes a rendirse o a unirse a su causa.
Esto sucedió también entre Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero. A Iturbide la venía muy bien sumar a Guerrero a su causa porque sabía que con esta acción podría convencer a otros grupos que habían sido derrotados en el pasado, pero que aún seguían presentes y tenían fuerza, como el de Nicolás Bravo.
Otro suceso de enorme importancia para la consumación fue el Plan de Iguala, un documento que logró ganar la simpatía de numerosos grupos que querían la independencia y ofrecía beneficios a prácticamente todos. Iturbide se atribuía la autoría del plan, pero fue elaborado con las ideas que ya estaban en el debate público, tanto de España como de Nueva España.
Para proteger y hacer valer el Plan de Iguala se creó el Ejército Trigarante, que garantizaría los principios del plan: religión, independencia y unión. En éste, el ejército de Vicente Guerrero quedó subordinado al de Iturbide, tal como habían acordado los dos jefes militares y tal como había previsto el segundo; otros líderes insurgentes se fueron sumando.
La consumación tuvo lugar con la entrada del Ejército Trigarante a la capital el 27 de septiembre de 1821, aunque el Acta de Independencia del Imperio Mexicano fue pronunciada un día después por la Junta Soberana que encabezaba Agustín de Iturbide.
Qué ocurrió al día siguiente, el 28 de septiembre de 1821? Se redactó y firmó el Acta de la Independencia del Imperio Mexicano, documento mediante el cual se declaró la emancipación del Imperio español.
El acta, de la que se elaboraron dos originales, se redactó y firmó en esa fecha en el Palacio Nacional de México. Entre las firmas del documento sobresale la de Agustín de Iturbide, quien es el primer firmante del Acta de Independencia y también el primer gobernante.-
¿Qué dice el Acta de Independencia? El texto que abre el acta dice: “La Nación Mexicana que, por trescientos años, ni ha tenido voluntad propia, ni libre el uso de la voz, sale hoy de la opresión en que ha vivido”.
“Los heroicos esfuerzos de sus hijos han sido coronados; y está consumada la empresa, eternamente memorable, que un genio, superior a toda admiración y elogio, amor y gloria de su Patria, principió”
Con esto terminaron los casi tres siglos del virreinato de la Nueva España y marcaron el nacimiento de una nación soberana.
Con información de Divulgación de la Ciencia e Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM.