La difusión de la cultura requiere un sustento de negocio, disponer de recursos y ser económicamente viable, afirma el doctor Gabriel Pliego Carrasco, director de la Escuela de Bellas Artes y de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Panamericana, UP, institución que creó la maestría en Gestión de las Artes y Políticas Culturales.
A partir del próximo ciclo escolar, la UP impartirá esta maestría, abierta a cualquier profesional interesado en el emprendimiento cultural y en una industria que genere la creación y difusión artística.
Su programa de estudios está dividido en cuatro cuatrimestres; en el primero, titulado Teoría de la cultura, se exponen conceptos generales de políticas culturales, así como la administración y el funcionamiento de estas industrias.
En el segundo, que es de especialización, los estudiantes deben elegir entre dos áreas: Administración de las artes, que tiene que ver con el emprendimiento, la administración del capital humano y la gestión de proyectos, o Políticas culturales, relacionada a la gestión gubernamental, legislación y diplomacia, entre otras.
El tercer cuatrimestre de la maestría, a la que se espera recibir un máximo de 30 estudiantes, se enfoca en la profesionalización. "Se aprende sobre financiamiento y procuración de fondos, liderazgo y responsabilidad social, comunicación, mercadotecnia cultural y marco jurídico de las empresas culturales", explica el director.
El último cuatrimestre tiene dos particularidades, las prácticas profesionales, que son de dos a cuatro meses en una institución de cultura y la presentación de un proyecto como tesina.
"Una característica importante de estos estudios, es su proyección internacional, tanto por los profesores extranjeros, como el requisito que se pide a los estudiantes, del nivel 560 Toffel de inglés, y desde luego, la oportunidad de trabajar fuera del país", dice Pliego Carrasco.
El perfil de sus estudiantes es abierto, concluye el director. "El campo de trabajo es muy amplio, de interés para artistas que quieren posicionarse en su ámbito y hacer emprendimiento. Un ingeniero que ama el arte y quiere poner galería, también es un candidato. Pueden desarrollar planes para administrar museos, zonas arqueológicas, llevar la gerencia de una orquesta, o una editorial, una disquera, agencias artísticas, ser gestor cultural en embajadas, productoras de cine, radio, o televisión. El sector turístico, asociaciones civiles, organismos internacionales que tengan una sección cultural, son campos de trabajo".
En agosto, los alumnos aceptados en esta maestría cursarán un propedéutico y en septiembre iniciarán las clases a cargo de profesores como Oliver Bennet y David Hesmondhalgh, de Inglaterra, Françoise Colbert de Canadá y Enrique Banús Irusta de España.