Adiós al odiado rival: Red Sox elimina a Yankees en el juego de comodín

Gracias a un inspirado Nathan Eovaldi y un sólido bullpen, los Medias Rojas de Boston derrotaron 6-2 a los Yankees de Nueva York en el juego de comodín de la Liga Americana en el arranque de los playoffs de las Grandes Ligas.

Consciente de lo que representa este tipo de duelos de ‘matar o morir’, Eovaldi subió a la lomita del Fenway Park y mantuvo a raya a los odiados rivales para dejarlos fuera de la postemporada y enfilarse a la Serie Divisional del joven circuito para enfrentar a las Rayas de Tampa Bay.

Durante más de 5.1 entradas, el lanzador diestro solo permitió un carrera limpia, cuatro hits y recetó ocho ponches para apuntarse la victoria sobre los ‘Bombarderos del Bronx’.

Por su parte, los neoyorquinos pusieron todas sus esperanzas en su ‘as’ Gerrit Cole, quien no pudo lucir como en sus mejores tiempos y solo lanzó por espacio de dos innings con tres carreras, cuatro imparables y solo recetó tres chocolates.

Rápidamente los pupilos de Alex Cora se pusieron en ventaja con un vuelacercas de Xander Bogaerts, quien raspó a Cole apenas en la primera entrada.

En el tercer rollo, Kyle Schwarber le puso el clavo en el ataúd a Gerrit Cole con otro cuadrangular para poner la pizarra 3-0 en favor de los patirrojos.

Ya en la sexta alta, Anthony Rizzo pegó jonrón solitario ante Eovaldi, lo cual provocó su salida para darle paso al bullpen.

Sin embargo, en la parte baja, el mexicano Alex Verdugo impulsó otra carrera para el 4-1 y en la séptima, produjo otras dos más para colocar la pizarra 6-1 y provocar la algarabía del público local.

Ya en el noveno y último episodio, los Yankees pegaron otro cuadrangular por conducto de Giancarlo Stanton para sellar el marcador 6-2.

Ahora, Boston viajará a Tampa Bay para enfrentar a las Rayas, quienes fueron el mejor equipo de la Liga Americana al tener marca de 100 victorias y 62 derrotas en la temporada regular.

Mientras que en la otra llave, los Astros de Houston, campeones del Oeste, se medirán ante los Medias Blancas de Chicago, campeones de la División Central.