JUPITER, Florida, EE.UU.— Los jugadores en paro patronal presentaron una contraoferta de varios temas a la Major League Baseball este sábado, mientras se a cerca la fecha límite del lunes que dio la MLB para llegar a un acuerdo laboral para iniciar la temporada en el día programado y completar el calendario de 162 juegos.
Tras llevar a cabo seis sesiones de negociaciones en temas centrales económicos desde el inicio del paro y hasta el 19 de febrero, las partes se han reunido seis días seguidos en el Estadio Roger Dean, la casa de entrenamientos de primavera de los Marlins de Miami y Cardenales de San Luis.
El lanzador Max Scherzer, el shortstop Francisco Lindor de los Mets, el pitcher de los Yanquis Gerrit Cole y el agente libre Andrew Miller estuvieron entre los jugadores que asistieron a las conversaciones. El noveno paro de la MLB, y primero desde 1995, llegó a su 87mo día.
Las partes arribaron al medio día, una hora antes de las reuniones anteriores de este año y se juntaron en grupos durante dos horas y media. El sindicato sostuvo una sesión por Zoom con alrededor de 30 representantes de jugadores.
Una delegación de la directiva posteriormente se acercó al grupo del sindicato en el edificio que incluye el clubhouse de los Cardenales y el sindicato presentó la contraoferta.
Quince minutos después el grupo de la MLB regresó a sus oficinas en el edificio principal del parque.
No se dieron a conocer inmediatamente los detalles de la contraoferta.
La MLB asegura que si no llegan a un acuerdo el lunes, comenzará a cancelar partidos debido a que no tendrían suficiente tiempo de entrenamiento para disputar un calendario completo.
Tras días de poco avance, las partes estuvieron cerca de un acuerdo el viernes sobre la lotería del Draft amateur durante la negociación que incluyó una sorpresiva reunión uno a uno entre el comisionado Rob Manfred y el líder del sindicato Tony Clark.
Las partes se mantienen alejadas en los asuntos de dinero, como el balance competitivo del límite de impuestos, la tasa y la elegibilidad para la arbitración salarial, el tamaño de la reserva para jugadores en pre-arbitración y el salario mínimo. Los jugadores también quieren reducir el reparto de ganancias.
Los jugadores no aceptan la fecha del lunes como plazo para salvar la campaña íntegra. Han sugerido que los encuentros que se cancelen pueden compensarse con dobles carteleras, algo que las Grandes Ligas descartan.
Una vez que pase la fecha del lunes, el tema del calendario se convertirá en otro asunto en disputa, así como el salario perdido y el tiempo de servicio.
El sindicato ha dicho a las Grandes Ligas que si se pierden encuentros y salarios, los agremiados no accederán a las propuestas de los directivos, que buscan expandir la postemporada y exhibir publicidad en uniformes y cascos.