El oligarca ruso Roman Abramovich, propietario del club inglés Chelsea FC, fue enlistado como persona sancionada por el gobierno británico dada su relación con el presidente Vladimir Putin, quien hace unos días ordenó una operación militar para invadir Ucrania, por lo que sus activos fueron congelados y se puso en espera la venta del equipo de futbol.
Entre las prohibiciones hacia Abramovich, que se dieron a conocer por medio de un comunicado, están el negarle el permiso para ingresar o permanecer en el Reino Unido, así como el cese de las transacciones con personas y empresas del país, lo que implica que no puede recibir ganancias como dueño del club.
¿Qué pasará con el Chelsea?
El equipo de futbol no puede ponerse en venta, así como tampoco realizar fichajes o renovar contratos de sus futbolistas. Asimismo, queda suspendido el comercio de sus productos oficiales en merchandasing y la comercialización de las entradas para los partidos, a excepción de las que fueron compradas antes que las sanciones fueran anunciadas este 10 de marzo.
“Dado el impacto significativo que las sanciones de hoy tendrían en el club de fútbol Chelsea y los posibles efectos colaterales de esto, el Gobierno ha publicado esta mañana una licencia que autoriza la continuación de una serie de actividades relacionadas con el fútbol en Chelsea. Esto incluye permisos para que el club continúe jugando partidos y otras actividades relacionadas con el fútbol que, a su vez, protegerán a la Premier League, la pirámide futbolística más amplia, los fanáticos leales y otros clubes”, se lee en el documento.
Como parte de esta licencia, que será revisada periódicamente, se encuentran las operaciones diarias como el pago de salario a sus empleados, como jugadores y entrenadores. Además de Roman Abramovich, quien también tiene participación en el gigante del acero Evraz y Norilsk Nickel, fueron incluidos en la lista otros seis nombres: Oleg Deripaska, Igor Sechin, Andrey Kostin, Alexei Miller, Nikolai Tokarev y Dmitri Lebedev.