El piloto de la escudería Red Bull, Max Verstappen, ha visto complicado el inicio de la temporada 2022 dentro de la Fórmula 1 luego de tener que abandonar dos carreras debido a problemas derivados de su monoplaza.
Sin embargo, todo parece indicar que el equipo ya encontró la razón y tomará cartas en el asunto previo al GP de Emilia Romagna, en Imola, Italia, a desarrollarse entre el viernes 22 al domingo 24 de abril en el Autódromo Internacional Enzo e Dino Ferrari. El desempeño del neerlandés no es lo que se esperaba después de la polémica final del año pasado en Abu Dhabi.
¿Cuál es la falla de su automóvil?
Los RB18 le han aportado falta de fiabilidad al equipo del mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez. En la vuelta 41 del GP de Australia, Verstappen abandonó, al igual que lo hizo en la carrera en Bahréin.
“Todo está bien con el motor, no hay ningún problema. El problema no estaba en la unidad de potencia, sino en el suministro de combustible. La línea de combustible estalló bajo alta presión”, explicó Helmut Marko, asesor de Red Bull, en declaraciones replicadas por el diario argentino Clarín.
Es entonces que descubrieron que la principal falla no era lo que creyeron, pues está relacionada con el rebote que se produce por conducir a altas velocidades por el efecto del suelo. “El caso fue simulado en el banco de pruebas, pero las fuerzas extrañas que produce el porpoising (rebote) no son sencillas de reproducir”, agregó.
El vacío producido en el sistema de combustible impedía a la gasolina llegar al motor. “Honda nos dijo que podemos contar con que el problema se solucione antes de la próxima carrera”, dijo Marko, quien espera que sus pilotos puedan tener un mejor papel para acercarse a Ferrari y Charles Leclerc.