Los San Francisco Giants se regresaron a casa con dos derrotas en su serie ante San Diego Padres en el Estadio Harp Helú de la Ciudad de México, y además al sufrieron, al parecer, de la popular ‘venganza de Moctezuma’.
El pasado fin de semana, Giants y Padres se enfrentaron en la CDMX, en partido de temporada regular de las Grandes Ligas (Major League Baseball). Los de San Francisco perdieron ambos juegos y además algunos jugadores se quejaron de la comida y los viajes.
“Creo que las tres cuartas partes de nuestro clubhouse tiene diarrea. Será bueno volver a casa. Ojalá las mier... desaparezcan y estemos mejor en un par de días”, comentó Logan Webb, pitcher de los Giants a NBC.
"I think three-quarters of our clubhouse has the s--ts." 💩😂
— SF Giants on NBCS (@NBCSGiants) May 3, 2023
Logan Webb was very candid about the grind of the Giants’ road trip pic.twitter.com/DqLBtJW4GR
Joc Pederson, jardinero central de los Giants, se quejó de la “falta de sazón y variedad” de la comida que consumieron en México. Sin embargo, cabe señalar que los alimentos que recibieron fueron traídos por la MLB debido a los antecedentes en el país de carne contaminada con clembuterol.
Pederson también reprochó los largos viajes que tuvieron que hacer el fin de semana desde su llegada a México y hasta su partida de regreso a Estados Unidos.
“Cuatro horas y media de vuelo para llegar (a la CDMX) y llegamos a la 1 de la mañana. Estuvimos ahí por dos horas, más una hora y media de camino en autobús; llegamos al hotel a las 4 de la mañana y cada trayecto en camión era de una hora y 15 minutos. El juego terminó y después de que salimos del campo son cuatro horas para estar en el aire”, comentó a la cadena NBC.
¿Qué es la ‘venganza de Moctezuma’ y por qué afecta a los turistas y visitantes?
La ‘venganza de Moctezuma’ es una expresión popular que se utiliza para describir a la diarrea del viajero que padecen algunos de los turistas que visitan México.
No significa que todos los extranjeros enfermen en México, ni que los residentes locales no estén exentos de este padecimiento gastrointestinal.
En el libro Vivan los tamales, Jeffrey M. Pilcher cuenta que dentro del valle central había un alga llamada tecuítlatl, la cual crecía en las aguas del lago de Texcoco y era recolectada por los habitantes, quienes las secaban y formaban tortas para cocinarlas con tomates y chiles.
“Esta alga proporcionaba una fuente inapreciable de proteínas pero, en un irónico paralelismo con el México moderno, prosperaba con los desechos humanos de la ciudad de Tenochtitlan. En consecuencia, los súbditos de Moctezuma padecían enfermedades gastrointestinales, a las cuales quizá llamaban la venganza de Quetzalcóatl, por el dios tolteca que fue exiliado cuando trató de poner fin a la práctica del sacrificio humano”.
Hay múltiples posibilidades que explican esta ‘venganza’ gastrointestinal; puede ser por ingesta de bacterias o sus toxinas, virus y parásitos. Entre los principales alimentos contaminados está el agua, ya que hay riesgos al ingerirla sin hervirla o sin purificarla.
Varios padecimientos coinciden con los síntomas, como la gastroenteritis, la cual causa dolor abdominal, diarrea, nauseas y fiebre.