Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Futbol, dio un discurso en la Asamblea Extraordinaria en donde calificó de un asesinato social las críticas y denuncias en su contra luego de un beso no consensuado a la futbolista Jenni Hermoso durante las celebraciones del Mundial.
Un grupo de jugadoras condenó su acción a través de un comunicado de la Asociación de Futbolistas Profesionales (FUTPRO), en donde más de 50 de ellas exigieron sanciones, 23 de ese grupo se consagraron como campeonas del mundo al ganarle a Inglaterra, comenzando por la deportista del Pachuca.
¿Qué piden las futbolistas que firmaron el comunicado?
Entre sus exigencias a los poderes públicos, buscan que sus acciones no queden impunes y apuntan a cambios estructurales para el éxito de las generaciones posteriores. “Nos llena de tristeza que un hecho tan inaceptable esté logrando empañar el mayor éxito deportivo del futbol femenino español”, escribieron.
Asimismo, reiteraron que están dispuestas a no volver a representar al país y renunciar a la Selección Española a menos que cesen a Rubiales. “Queremos manifestar que todas las jugadoras que firman el presente escrito no volverán a una convocatoria de la Selección si continúan los actuales dirigentes”.
¿Qué ha dicho Jenni Hermoso sobre el beso no consentido?
Jenni Hermoso desmintió que se tratara de un hecho mutuo, como explicó Rubiales. “Quiero aclarar que, tal y como se vio en las imágenes, en ningún momento consentí el beso que me propinó, y por supuesto en ningún caso busqué alzar al presidente. No tolero que se ponga en duda mi palabra y mucho menos que se inventen palabras que no he dicho”.
En un comunicado personal, Hermoso dio las gracias ante el apoyo y argumentó que no quiere interferir con los procesos legales en curso al detallar que las explicaciones del presidente de la Federación sobre el incidente son “categóricamente falsas y parte de la cultura manipuladora que él mismo ha generado”.
Jenni negó que hubiera existido la conversación a la que Rubiales hizo referencia y reiteró que el beso no consensuado no fue de su agrado, tal como dijo en una transmisión en vivo después de la final de la Copa Mundial. También aseguró que la situación le generó un shock “por el contexto de celebración”, pero ahora siente la necesidad de denunciar.
“Me sentí vulnerable y víctima de una agresión, un acto impulsivo, machista, fuera de lugar y sin ningún tipo de consentimiento de mi parte. Sencillamente, no fui respetada”. Hermoso confirmó que se le pidió hacer una declaración conjunta para bajar la presión sobre Rubiales, pero pensaba en su triunfo y en no quitar protagonismo al logro junto a sus compañeras.
Hace unos días, la jugadora emitió un escrito por medio de su sindicato en el que explicó que defendería sus intereses. “Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto”, señaló entonces.
“Desde FUTPRO expresamos nuestra firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres”, la apoyó el organismo, que mantuvo su postura pese a la negativa de Rubiales de renunciar a su cargo. “Queremos remarcar que ninguna mujer debería verse en la necesidad de contestar ante las contundentes imágenes que todo el mundo ha visto y por supuesto, no se deberían ver involucradas en actitudes no consentidas”.