La ceremonia de inauguración de los Juegos Panamericanos Santiago 2023 se realizará el viernes 20 de octubre en el Estadio Nacional de Chile, mismo sitio en donde un grupo de camarógrafos denunció el robo de sus equipos por un valor de cerca de 100 mil dólares.
Hasta el momento no se ha detallado el material que fue sustraído. Según medios locales, se informó de inmediato al cuerpo militarizado de la Policía “Carabineros de Chile”, que envió una unidad del laboratorio de criminalística para emprender la investigación.
Las primeras pesquisas apuntan a la prisa como posible razón del fallo de seguridad, ya que el gran retraso que acumulan los recintos deportivos a pocos días de la apertura oficial ha obligado a incrementar de forma apresurada el número de trabajadores en el interior.
Sin embargo, quienes acudieron al país sudamericano a seguir las actividades recuerdan la pasada organización de la Copa América en 2015, en donde varios fotógrafos y reporteros acreditados también fueron víctimas de la delincuencia.
¿Qué dicen las autoridades del robo a los camarógrafos?
El director ejecutivo de la corporación Santiago 2023, Harold Mayne-Nicholls, lamentó la situación y aseguró que se tomaron todas las medidas necesarias para incrementar la seguridad en todos los recintos.
“Con profundo pesar quiero comunicar que en dependencias del estado nacional sufrimos esta tarde el robo de sus pertenencias un grupo de camarógrafos de la televisión. Es lamentable lo que sucedió”, afirmó en un comunicado, en el que mantiene la esperanza de encontrar el equipamiento para “no afectar” la imagen de la justa deportiva.
Unas horas antes, el gobernador, Claudio Orrego; el director general de Carabineros, Ricardo Yáñez; el subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara; y la alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Ríos, ofrecieron una conferencia de prensa para detallar las medidas ordenadas ante la posibilidad de disturbios por el cuarto aniversario de las protestas masivas de 2019.
*Con información de EFE.