El empresario estadounidense Todd Boehly, presidente de la sociedad Eldridge Industries, es dueño de algunos equipos importantes en disciplinas como el futbol, béisbol y basquetbol.
En 2022 adquirió se unió a la Premier League, pero de acuerdo con la página oficial de la MLB, estos son los otros clubes en los que Boehly tiene injerencia:
- Chelsea Football Club
- Los Angeles Dodgers (posee un 20%)
- Los Angeles Lakers (tiene el 27% del equipo de la NBA)
- Los Angeles Sparks (equipo femenino de baloncesto)
- Cloud9 (deportes electrónicos)
- DraftKings (empresa de juegos deportivos y entretenimiento digital).
Su interés por los deportes nació cuando era joven, pues conformó el equipo de lucha grecorromana que ganó en dos Campeonatos de la Conferencia Atlética Interestatal (IAC) en 1990 y 1991, según The Daily Mail.
¿Cuál es la fortuna de Todd Boehly?
De acuerdo con el Índice de Millonarios de Bloomberg, su fortuna está valuada en 6 mil 800 millones de dólares, lo que lo ubica entre las 500 personas más ricas del mundo en el puesto número 375, por debajo de Liz Mohn y arriba de George Lucas, creador de la franquicia de Star Wars.
Esto es gracias a algunas de sus inversiones en más de 70 negocios operativos como A24, Security Benefit, Life is Beautifil, South by Southwest.
Los jugadores más caros en los equipos de Todd Boehly
Con el contrato más grande en la historia del deporte en Estados Unidos, los Dodgers recientemente ficharon al japonés Shohei Ohtani por un contrato de 700 millones de dólares y 10 años en la MLB, con el que lo convencieron ante las ofertas de los Giants de San Francisco y los Toronto Blue Jays.
Sumado a ello también se hicieron del pitcher más deseado del mercado invernal con Yoshinobu Yamamoto, quien firmó por 325 millones de dólares y 12 temporadas. Tienen prometido el pago de 857 millones de dólares en salarios para sus estrellas hasta el 2044.
En el caso del Chelsea, se pagó la cantidad de 121 millones de euros por Enzo Fernández tras su campeonato con Argentina en Qatar 2022; el exjugador del Benfica se convirtió en el sexto fichaje más costoso de su historia en un plan de resurgimiento.