Las remesas tocaron un máximo histórico en agosto, al sumar 4 mil 743 millones de dólares, lo que implicó un aumento de 32.7 por ciento respecto a los 3 mil 574 millones de igual mes de un año antes.
De acuerdo con datos de Banco de México (Banxico), en los primeros ocho meses del presente año el envío de dinero por parte de los connacionales alcanzó los 32 mil 931 millones de dólares, 24.8 por ciento más que los 26 mil 395 millones de dólares de igual lapso de un año antes.
Para Alberto Ramos, economista en jefe de Goldman Sachs para América Latina, las remesas han apoyado a la cuenta corriente y al consumo privado, en particular para las familias de bajos ingresos, que tienen una alta propensión al consumo y son los destinatarios abrumadores de tales transferencias.
“Las generosas transferencias fiscales de apoyo a salarios / ingresos en Estados Unidos, un nivel competitivo del tipo de cambio y una profunda contracción de la actividad y el empleo en México han actuado como impulsores de las remesas en dólares de EU a México. La moderación de la actividad y el perfil de crecimiento de los ingresos en Estados Unidos deberían conducir a una moderación de los flujos de remesas a México en los próximos trimestres”, estimó.
Analistas de BBVA detallaron que Jalisco ocupó el primer puesto como la entidad que más remesas captó en el primer semestre de este año, con 2 mil 490 millones de dólares, seguido de Michoacán y Guanajuato, con 2 mil 318 y mil 955 millones de dólares, respectivamente.
Analistas de Banorte reiteraron su expectativa para este año, en el cual las remesas alcanzarían un flujo récord de entre 48 mil y 48 mil 500 millones de dólares.
“A pesar de algunos vientos en contra en EU, la dinámica de las remesas permanece muy fuertes y sugieren importantes riesgos al alza a nuestra expectativa de entradas todo el año entre 48 mil y 48 mil 500 millones de dólares”, abundaron.