El precio de los combustibles al inicio del año se mantuvo prácticamente en el mismo nivel respecto al cierre de 2021, debido a los estímulos fiscales otorgados por el Gobierno de México.
Alejandro Montufar Helu, CEO de PETROIntelligence, señaló que no hubo gasolinazo este año, ya que aunque el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) se ajustó al ritmo de la inflación (7.37 por ciento) también se deben tomar en cuenta el estímulo fiscal otorgado por la Secretaría de Hacienda.
“Hay personas que hablaban de un gasolinazo porque íbamos a pagar más de IEPS en comparación del año pasado, pero mucha gente se deja llevar por el rango máximo, pero lo que hay que ver es el precio real (de la gasolina) en conjunto con el estímulo fiscal”, dijo.
El pasado 23 de diciembre, Hacienda publicó que el IEPS de la gasolina regular (magna) aplicable a partir del 1 de enero de 2022 sería de 5.4917 pesos por litro, mientras que la de la gasolina premium se ubicaría en 4.6375 pesos y el del diésel en 6.0354 pesos.
Sin embargo, para la semana del 1 al 7 de enero de 2022, el monto de estímulo fiscal para la gasolina regular fue de 3.2623 pesos por litro, seguido de 1.4421 pesos para la gasolina premium y de 2.6342 pesos para el diésel.
“Debemos considerar los estímulos para conocer el IEPS efectivo a pagar, esto (siempre) será relativo a la semana que comparemos”, explicó Montufar.
De acuerdo con la plataforma PETROIntelligence, durante el primer lunes de 2022 el precio promedio de la gasolina regular a nivel nacional es de 20.557 pesos por litro, nivel prácticamente igual al observado durante el 31 de diciembre del 2021.
La gasolina premium y el diésel mostraron el mismo comportamiento, por lo que actualmente se comercializan en 22.636 y 22.048 pesos por litro, respectivamente.
Por otra parte, el especialista afirmó que la variante ómicron será el factor que marcará la pauta de los precios del mercado de las gasolinas durante el inicio del año, aunque no considera que haya un descenso tan pronunciado como sucedió en la primera ola de la pandemia durante 2020.
“Mi estimación es que no veremos precios por debajo de los 20 pesos para la gasolina magna, 22 pesos para la premium y 21.50 pesos para el diésel”, pronosticó.
En los últimos dos años, el efecto de la pandemia de COVID-19 ha provocado una alta volatilidad en los precios de las gasolinas.
Entre marzo y mayo de 2020, los precios de la gasolina regular y premium llegaron a registrar reducciones mensuales de entre 17 y 22 por ciento, debido al primer gran cierre de la economía, mientras que entre febrero y marzo del 2021, se observaron incrementos que oscilaron el ocho por ciento debido a la apertura gradual de las actividades económicas, según datos de PETROIntelligence.
A pesar de estas fluctuaciones mensuales, el gobierno de México todavía puede presumir que las gasolinas no han aumentado por arriba de la inflación.
“Desde que inició la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, en diciembre de 2018, hasta la fecha, la inflación acumulada de las gasolinas siempre se ha mantenido por debajo de la inflación general de precios, pero si consideramos únicamente los indicadores de inflación mensual, podemos encontrar resultados mixtos, debido al dinamismo de los mercados y a las disrupciones que ha ocasionado la pandemia”, dijo el CEO de PETROIntelligence.