El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que el PIB de México crecerá 2.8 por ciento este 2022, 1.2 puntos menos de lo previsto en octubre pasado.
Esto se debe al ajuste a la baja en los pronósticos de crecimiento de la economía estadounidense en igual proporción, ante menores perspectivas sobre el paquete fiscal Build Back Better. Hacia el 2023 se espera un crecimiento de 2.7 por ciento, 0.5 puntos arriba de las proyecciones de tres meses atrás.
“La rebaja de calificación de Estados Unidos trae consigo la perspectiva de una demanda externa de México más débil a la esperada en 2022″, señala el reporte Perspectivas Económicas Mundiales (WEO por sus siglas en inglés), publicado este martes.
Hacia 2023, el FMI anticipa un crecimiento de la economía mexicana de 2.7 por ciento, 0.5 puntos arriba de las proyecciones de tres meses atrás. Mantener buenos niveles de crecimiento en el mediano plazo es el reto para México, al igual que para otros países de América Latina, dijo Gita Gopinath, directora del Departamento de Análisis del FMI.
“La continuación de interrupciones en las cadenas de proveeduría en 2022, los contagios por el virus ómicron, y el endurecimiento de las condiciones monetarias en México, son factores que en términos generales lo explican. Habrá que poner atención en el crecimiento de mediano plazo, veremos más de eso para la primavera. Sin embargo, mantener buenos niveles de crecimiento en el mediano plazo ha sido el reto para varios países de América Latina”, dijo.
El recorte en los estimados para México de 1.2 puntos porcentuales para 2022 fue similar al aplicado a Brasil y a Estados Unidos, de los cuales se espera un crecimiento de sus economías de 0.3 y 4.0 por ciento este año, respectivamente. Los tres países fueron a los que el FMI hizo el ajuste más pronunciado en sus estimados para este año.
Efecto EU
Una menor perspectiva sobre la legislación del paquete fiscal Build Back Better, en Estados Unidos, aunado a un retiro anticipado de la flexibilidad monetaria extraordinaria y continuas interrupciones en las cadenas de suministro, llevaron a la baja en el pronóstico de crecimiento del PIB estadounidense y junto con la expectativa de una desaceleración en el crecimiento de China, propiciaron el ajuste en los pronósticos de crecimiento mundial.
La economía global se moderará este 2022 a 4.4 por ciento desde un repunte estimado de 5.9 por ciento en 2021, medio punto porcentual menos que lo previsto reflejando la desaceleración en las dos economías más grandes, Estados Unidos y China. Hacia el 2023 se estima un repunte de 3.8 por ciento, 0.2 puntos porcentuales más explicado por una recuperación mecánica, según el FMI.
El estimado para China bajó a 4.8 por ciento en 2022 desde un previo de 5.6 por ciento y para 2023 se prevé un repunte de 5.2 por ciento, 0.1 punto menos que en el reporte anterior y refleja la continua reducción del sector inmobiliario y una recuperación más débil de lo esperado en el consumo privado.
“El pronóstico es condicionado a que los resultados de salud adversos disminuyan a niveles bajos en la mayoría de los países para fines de 2022, suponiendo las tasas de vacunación mejoran en todo el mundo y las terapias se vuelven más efectivas”, señala el informe.
Al iniciar el tercer año de la pandemia, el costo del virus para la economía global se estima en 13.8 billones de dólares para 2024, por arriba de los 12.5 billones de dólares previstos anteriormente.