Dos métricas clave del mercado laboral de Estados Unidos podrían tardar hasta 2024 en recuperar su tendencia de crecimiento anterior a la pandemia, lo que impide por ahora alcanzar el máximo nivel de empleo, según un nuevo estudio del Banco de la Reserva Federal de San Francisco.
El alto nivel de jubilaciones está reduciendo tanto la tasa de participación en la fuerza laboral —la proporción de estadounidenses que trabajan o están en busca de empleo— como la relación empleo-población, que mide el número de personas empleadas en relación con la población total en edad de trabajar. Es poco probable que vuelvan a los máximos previos a la pandemia, según el documento.
“Ambas series están muy por debajo de la tendencia, lo que sugiere que el mercado laboral está lejos del objetivo de máximo empleo de la Fed, a pesar de las condiciones muy sólidas del mercado laboral que reflejan en parte las restricciones laborales relacionadas con la pandemia”, escribieron los investigadores Sarah Albert y Robert G. Valletta en un estudio publicado este lunes.
“Nuestro análisis sugiere que alcanzar el potencial a largo plazo del mercado laboral puede requerir algunos años más de expansión”, dijeron.
Si bien la baja tasa de desempleo, las ofertas de trabajo casi récord y el fuerte crecimiento salarial apuntan a un mercado laboral ajustado, la debilidad de la participación sugiere que aún hay espacio por recorrer. Muchos estadounidenses mayores se jubilaron anticipadamente durante la pandemia gracias a la solidez patrimonial y a las valoraciones de las viviendas, mientras que los problemas de cuidado de los hijos y las preocupaciones por el COVID-19 siguen siendo un obstáculo para que otros vuelvan a trabajar.
Los resultados parecen contradecir la evaluación del mercado laboral del presidente de la Fed, Jerome Powell, que dijo que era “consistente con el máximo empleo” en la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto del mes pasado. La Fed no ha explicado explícitamente cómo define el máximo empleo, pero ha dicho en repetidas ocasiones que busca una recuperación “amplia e inclusiva”.
El mercado laboral estadounidense mostró una fortaleza inesperada en enero, con un aumento de las nóminas de 467 mil personas, lo que aumenta la presión para que el banco central suba las tasas de interés en medio de la inflación más alta en décadas.