Prepárese para recibir un susto en su próxima visita al supermercado, sobre todo si planea echar aguacates a su carrito.
El aguacate hass se vende a 89 pesos el kilogramo en Chedraui y Soriana, según los catálogos virtuales de ambas tiendas. En Walmart, la variedad orgánica alcanza los 99 pesos por una bolsa de 800 gramos.
Su precio promedio en mercados y centrales de abasto para lo que va de marzo es de 63.54 pesos el kilogramo, de acuerdo con el Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM).
Esto representa un aumento de 12.02 por ciento en su precio respecto al promedio de febrero y de 81.70 por ciento respecto a marzo del año pasado. En comparación con marzo de 2019 (31.62 pesos el kilogramo), el precio ya se duplicó.
El aguacate es uno de los productos agrícolas más azotados por la inflación. En febrero, se ubicó como el tercer producto más encarecido en el índice de frutas y verduras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), con una escalada de 8.70 por ciento a tasa mensual y 83.19 por ciento anual. Lo superaron sólo el limón (166.81 por ciento anual) y la cebolla (112.11 por ciento).
Son varias las fuerzas que presionan a los precios del aguacate desde hace meses, desde inclemencias climáticas, hasta altos índices de inseguridad en estados productores, como Michoacán y Jalisco.
Los altos precios del fertilizante son, sin embargo, la mayor fuente de presión para productores. Su costo prácticamente se duplicó en 2021, y se espera que las escaladas continúen por la invasión de Rusia a Ucrania.
El conflicto disparó los precios del petróleo, un insumo básico en la manufactura de muchos agroquímicos. Además, amenaza con causar escasez de fertilizantes rusos, que representan cerca de un tercio de las importaciones mexicanas. El gobierno federal intentará cubrir la demanda nacional con su programa de Fertilizantes para el Bienestar, pero sólo para pequeños productores. Para los de escala mayor, lanzará un programa de compras consolidadas.
El índice de frutas y verduras del Inegi cerró febrero con un alza anual de 19.60 por ciento, su tasa más alta para el mes en seis años.