Tras perder un 35 por ciento de la matrícula escolar, los colegios privados inician el ciclo 2022-2023 con menos ingresos y mayores costos operativos, sin poder aumentar tarifas al ritmo de la inflación ante la golpeada economía de las familias.
“Hemos tenido una pérdida de matrícula que va del 20 al 35 por ciento en promedio, pero hubo escuelas que tuvieron un abandono escolar de hasta 50 por ciento. Todo esto disminuye los ingresos y las escuelas del nivel preescolar y primaria son las más afectadas, de éstas cerraron definitivamente cerca del 20 por ciento”, dijo María de Jesús Zamarripa, presidenta de la Confederación Nacional de Escuelas Particulares (CNEP).
La pandemia de COVID-19 y el cierre obligado de las escuelas a partir de marzo de 2020, solo agudizó la tendencia a la baja. Se estima que en los últimos dos años la deserción escolar a nivel primaria fue de 1.5 millones de estudiantes tanto de escuelas privadas como públicas, que se sumaron a los 35 millones de mexicanos de más de 15 años que no han terminado su educación básica, expuso Alfredo Villar Jiménez, presidente de la Asociación Nacional de Escuelas Particulares (ANEP).
“Del 100 por ciento de la matrícula de niños inscritos en este ciclo que había antes de la pandemia hasta estos momentos se tiene poco más del 55 por ciento, hay que esperar este par de semanas para el ciclo escolar que inicia el 29 de agosto y sí estimamos haya un aumento de inscripciones para que puedan sobrevivir las escuelas y los estu- diantes puedan recuperarse”, dijo el presidente de la ANEP, organismo que cuenta con unas 2 mil 500 escuelas socias.
En medio de la tensión por menos niños inscritos, menores ingresos y mayores costos de operación algunas escuelas han aumentado tarifas, pero son las menos, solo una de cada 10 lo ha hecho y las alzas están lejos del 7 por ciento de la inflación promedio anual.
“En las que lo han tenido que hacer por necesidades de nómina y gastos de operación, el alza va en un 3 y 5 por ciento, en promedio un 2.5 por ciento”, dijo la presidenta de la CNEP.
Escuelas privadas acusan exceso de regulación
Ante la crisis de salud, que se trasladó a la economía, los colegios particulares debieron hacer toda una costosa reingeniería con recortes de personal por grupos más reducidos, a la par que el gobierno los sometió a mayor regulación e inspecciones.
“Pareciera que vamos en sentido contrario. Ahora que estamos más necesitados de recursos, de hacer inversiones para eficientar el servicio, se presentan normativas que francamente están sobre regulando. Yo desearía disminuir o eliminar algunos gastos superfluos y concretamente en esos rubros de la regulación”, apuntó Zamarripa del CNEP.