Más allá de los temas de disputas comerciales con EU, la delegación encabezada por Antony Blinken, secretario de Estado, invitó a México a participar en inversiones multimillonarias en el sector de semiconductores, aseguró el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.
Los funcionarios estadounidenses se reunieron con el presidente Andrés Manuel López Obrador y parte de su gabinete, e hicieron la propuesta de alinear la Ley Chips y Ciencia –firmada por el presidente Joe Biden– con la política económica de México.
Dicha ley contempla un programa de subsidios de casi 50 mil millones de dólares, y busca ampliar la capacidad productiva de los semiconductores para competir con China.
“Vinieron a invitarnos, imagínense, a impulsar los semiconductores. Ellos ya autorizaron un programa de más o menos 50 mil millones de dólares y nos invitan a participar”, comentó el canciller tras su participación en la Segunda Reunión Anual del Diálogo Económico de Alto Nivel.
La secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina Raimondo, destacó que la Ley Chips quiere integrar a México, pues incluso las propias empresas de semiconductores en EU han pedido la participación de México para integrar de mejor manera las cadenas de suministro.
“Todas las empresas de semiconductores ya nos han comentado que al construir nuevas fábricas en Estados Unidos les gustaría que el resto de la cadena de suministro estuviera en América del Norte. Así que queremos explorar con ustedes cómo podemos alinear nuestras políticas para maximizar toda esa cadena de suministro”, dijo.
Blinken enfatizó que los líderes de la industria automotriz de ambos países están avanzando en la transición de vehículos eléctricos para abordar la crisis climática, por lo que se necesita una cadena de suministro de semiconductores resiliente, y la Ley de Chips y Ciencia busca ese objetivo.
“Van a trabajar con empresas como Intel para desarrollar investigación, diseño, ensamblaje y para fabricación aquí en México, para asegurar que los microcomponentes que necesitamos para el siglo XXI se produzcan en América del Norte”, aseguró Blinken.
El canciller destacó que la invitación es sinónimo de miles de empleos y una “puerta enorme” que se abre para México de desarrollo y de crecimiento económico, pues tiene que ver con la electromovilidad en el sector automotriz.
“México le toma la palabra a los ofrecimientos que ha hecho Estados Unidos. Nos han hecho una invitación de la manera más intensa posible y esto significa más empleo, integración y futuro”, dijo el canciller tras su participación.
“También tienen el ofrecimiento de participar en telecomunicaciones para acelerar el crecimiento hacia el 5G. En resumen es invitar a que México pueda participar en inversiones multimillonarias, entonces le agradecemos mucho al presidente Joe Biden, ha sido un éxito”, puntualizó.
La secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, comentó que ya llevan un año trabajando en la parte de semiconductores, con la academia, privados y gobierno para integrar este sector a la fuerza laboral y que pueda enfrentar los retos.
“La invitación de Gina es para ampliar este margen e ir por más, desarrollar la fuerza de trabajo”, destacó.
Integrar con energías limpias
La reunión que tuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador con Antony Blinken dejó entrever que la visión del presidente es integrar más el comercio y la economía con Estados Unidos, pero utilizando energías renovables.
“Uno de los temas en el que nos concentramos en la reunión con el presidente López Obrador es algo que creo es una visión que él tiene, que es la integración de nuestras economías, y la integración de América del Norte, y una de las formas de lograrlo es a través de energía limpia”, dijo Blinken en la rueda de prensa organizada por la Secretaría de Economía.
En su opinión, ambos países tienen oportunidades compartidas para construir un futuro energético, que promueve objetivos climáticos y también promueve un crecimiento sustentable.
Más temprano, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el encuentro con Blinken había sido “productivo y amistoso”.
Otro de los temas en la cumbre EU-México fue el tráfico transfronterizo de fentanilo y el flujo de migrantes hacia territorio estadounidense.
Blinken, en un comunicado divulgado por el Departamento de Estado, expresó su agradecimiento por la colaboración con México en una variedad de temas de interés mutuo, como la amenaza compartida de la producción y el tráfico de fentanilo.