México registra ya un estancamiento de seis años en materia de progreso social, al registrar 63 puntos de 100 posibles en el Índice de Progreso Social (IPS) durante 2021.
El resultado significó el segundo peor año desde que se tiene registro; únicamente en 2015 se observó un peor puntaje con 62.9 unidades, afirmó el Observatorio Económico México, ¿cómo vamos?
Precisó que en 2018, México alcanzó el mayor puntaje en el progreso social. Ese mismo año se alcanzó el último pico de la actividad económica y del crecimiento de la inversión en el país, por lo que es evidente que el crecimiento sostenido es una condición necesaria para el progreso social.
Entre 2015 y 2018, se observaron avances en el progreso social, con un acumulado de 1.9 puntos en dicho periodo, mientras que en los años subsecuentes se observan retrocesos.
La caída acumulada entre 2018 y 2021 en el progreso social es de 1.8 puntos. Además, si bien en 2020 y 2021 (años impactados por la pandemia) se observan disminuciones de mayor magnitud en el puntaje de progreso social, desde 2019 (año prepandemia) se observa una caída de 0.3 puntos.
¿Qué estados se quedan más atrás en el progreso social?
El IPS muestra que la puntuación de 24 entidades cayó entre 2020 y 2021. Los cinco estados con mayores retrocesos fueron Veracruz, Oaxaca, Puebla, Hidalgo y Campeche, con pérdidas superiores a 2.5 puntos.
“Una de las lecciones más relevantes del Índice de Progreso Social es que en México las cosas mejoran muy lentamente, y se pueden deteriorar rápidamente. Por lo tanto, las soluciones deben ser integrales, estructuradas y de largo plazo. El retroceso en el bienestar demanda evaluaciones que permitan diseñar estrategias efectivas”, recalcó el observatorio.
El análisis muestra que las entidades en las que el flujo comercial como porcentaje del Producto Interno Bruto Estatal es menor, son también las entidades donde se observa un menor progreso social de forma consistente (Veracruz, Guerrero, Chiapas y Oaxaca).
A pesar de que los estados tienen el mismo marco institucional, existen algunas que no han podido integrarse a la dinámica del comercio internacional.
“Concluimos que los insumos, infraestructura y capital humano en las entidades es determinante para el progreso social. Tomando como referencia a Oaxaca, Chiapas y Guerrero –que cuentan con el porcentaje de flujo comercial más bajo respecto a su PIB de las 32 entidades del país–, no será posible integrarlos a la dinámica de comercio internacional observada en otras entidades del país mientras no cuenten con la infraestructura y capital humano suficientes”, detalló.
El observatorio advirtió que si bien la necesidad de mayor inversión en infraestructura, salud y educación es más apremiante en el sur de México, no es exclusiva para esta región, pues existen diferencias muy marcadas en el progreso social observado en las distintas regiones de la República Mexicana.