Las pizarras de los mercados accionarios en Wall Street y Europa finalizaron el jueves con pérdidas, tras los comentarios de miembros de la Fed, que siguen apuntando a que las tasas de interés aún no se encuentran en un terreno suficientemente restrictivo, a pesar de que la información económica arroja cifras más débiles, lo que incrementa las preocupaciones de una recesión.
Esto ha borrado el optimismo de los inversionistas y propiciado una mayor aversión al riesgo, que llevó a que las bolsas extendieran sus pérdidas y a que el peso retornara a niveles de 19 unidades.
Con ello, la mayoría de los índices bursátiles de referencia reportan un balance negativo en lo que va de la semana. El Dow Jones encabeza las pérdidas, con 3.67 por ciento, mientras que el S&P 500 reporta un retroceso de 2.51 por ciento, y el Nasdaq un 2.05 por ciento menos.
En tanto, el Euro Stoxx 50 ha caído 1.36 por ciento, y el FTSE 100 de Reino Unido y el DAX 30 de Alemania acumulan bajas de 1.23 y 1.10 por ciento, en cada caso. En México, el S&P/BMV IPC tuvo en el periodo una caída de 0.36 por ciento.
“Las acciones en Estados Unidos cayeron debido a que los participantes del mercado continúan temiendo que la Reserva Federal (Fed) pueda endurecerse demasiado y provocar una recesión”, indicaron analistas de Wells Fargo.
Sloane Marshall, analista asociada de Edward Jones, señaló que la confianza de los inversionistas se está agriando a medida que la narrativa sobre un aterrizaje suave de la economía se vuelve menos probable. Agregó que otro factor negativo para las bolsas es el agresivo ciclo de aumento en las tasas de interés para combatir la inflación.
Lael Brainard, funcionario de la Fed, coincidió con el resto de las declaraciones que han realizado los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) y ayer dijo que “las tasas deberán mantenerse elevadas durante un periodo para enfriar aún más la inflación”.
Las previsiones de miembros de la Reserva Federal apuntan a que la tasa de interés podría alcanzar un rango máximo de 5.25 a 5.50 por ciento.
Impactarán tasas
Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Ve por Más, explicó que, “naturalmente, las consecuencias del apretamiento monetario, que inició en 2022, se traducirán en un menor dinamismo del consumo y la inversión privada en Estados Unidos, lo que a su vez contribuirá a un menor crecimiento en la producción y en la contratación de trabajadores”.
“Ya hay algunas señales de debilidad, primero, en el sector de la construcción, muy sensible a las tasas de interés. Pero también en indicadores más generales, como las ventas minoristas y la producción manufacturera, que se debilitaron significativamente en diciembre pasado”, abundó.
Saldaña destacó que, “se estima una recesión breve y poco profunda en la economía estadounidense, entre el segundo y tercer trimestre, además de un crecimiento para el PIB de alrededor de 0.5 por ciento en todo 2023″.
De igual forma, especialistas de Grupo Financiero Banorte, indicaron que, “los mercados accionarios mantienen un sentimiento negativo a medida que aumentan las preocupaciones de una posible recesión económica, mientras se ponderan las perspectivas y las valuaciones de los activos de riesgo contra el reciente repunte de principios de año”.
Ignacio Saralegui, estratega de inversiones sénior para América Latina en Vanguard, indicó que, la historia muestra claramente una cosa y es que los mercados financieros se levantan antes que la economía. “Las acciones globales aún no han caído materialmente por debajo de su rango de valor razonable, lo que históricamente han hecho durante las recesiones”.
Peso también retrocede
En el mercado cambiario, la perspectiva de que el ciclo alcista en los tipos de interés no cederá provocó una mayor aversión al riesgo que resintió la divisa local, y por momentos cotizó arriba de las 19 unidades.
Ayer el tipo de cambio continuó presentando correcciones al alza y reportó su segunda jornada de pérdidas, en las que acumula un retroceso de 1.64 por ciento. De acuerdo con datos del Banco de México finalizó ayer en las 18.9924 unidades, con una depreciación de 0.76 por ciento.
En la semana acumula una pérdida de 1.19 por ciento, equivalente a 22.25 centavos.