El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la economía de México es fuerte, esto tras ser cuestionado sobre si la quiebra de bancos en Estados Unidos repercutirá en nuestro país.
“Está bien la economía y para que tengan nota: les puedo decir que ahora no es como en los tiempos del neoliberalismo, que les daba ‘gripa’ en Estados Unidos y aquí nos daba pulmonía. Ahora es al revés, ahí pueden quebrar los bancos y aquí no pasa nada”, aseguró en su ‘mañanera’.
Como muestra, el mandatario afirmó que la banca en México obtuvo una cifra récord en utilidades de 250 mil millones de pesos durante 2022.
“Entonces, no pueden decir que la economía está mal”, apuntó.
#EnLaMañanera | 'Allá, en #EU, pueden quebrar los bancos y aquí no pasa nada, o pasan cosas buenas': el presidente @lopezobrador_ considera que la situación económica en México va bien, con respecto a lo que está pasando con el país vecino del norte. pic.twitter.com/PoIQqpnGrF
— El Financiero TV (@ElFinancieroTv) March 16, 2023
Así inició el ‘pánico’ en el sector bancario
La incertidumbre en el sector bancario global comenzó el 10 de marzo con el cierre de Silicon Valley Bank, una institución que financiaba a varias startups.
Apenas dos días después, los reguladores de Estados Unidos anunciaron el aseguramiento de otra institución (Signature Bank) y el lanzamiento de un programa de emergencia para respaldar el dinero de los depositantes en esas instituciones.
Las preocupaciones llevaron a la calificadora Moody’s a rebajar la perspectiva para todo el sector bancario de Estados Unidos de ‘estable’ a ‘negativa’.
Si bien los reguladores federales “anunciaron que todos los depositantes de SVB y Signature Bank serán resarcidos, la rápida y sustancial disminución de la confianza de los inversionistas bancarios que precipitó esta acción resalta claramente los riesgos en la gestión de activos y pasivos de los bancos de Estados Unidos exacerbados por el rápido aumento de las tasas de interés”, explicó en un reporte.
El ‘miedo’ provocó después problemas a Credit Suisse, institución que vio cómo sus acciones se desplomaron y tuvo que pedir una ‘ayuda de emergencia’ al Banco Central de su país, que le dio una línea de financiamiento por 54 mil millones de dólares.