El consumo en México tropezó en julio y anotó una caída de 3.8 por ciento mensual, sin embargo, el dato puede estar explicado por el dinamismo que imprimió el Hot Sale un mes antes, de acuerdo con el Indicador de Consumo Big Data BBVA Research.
“La contracción del gasto podría reflejar la alteración del efecto estacional de la serie, después de un crecimiento inusual para un mes de junio, como resultado de la materialización del Hot Sale en el sexto mes del año, por primera vez desde su lanzamiento”, indicó la institución financiera.
Al interior, la compra de bienes tuvo una caída de 3.9 por ciento mensual en julio, con retrocesos tanto en alimentos como en bienes para el cuidado de la salud, cuyas contracciones fueron de 3.8 y 6.8 por ciento, respectivamente.
En cuanto a los servicios, la contracción fue de 3.6 por ciento mensual en julio y en su interior el consumo en hoteles descendió 7.4 por ciento, con lo que regresó a niveles de diciembre del 2020.
“Por tipo de establecimiento, el consumo online cayó 7.9 por ciento... el consumo en establecimientos físicos, por su parte, cayó 2.6 por ciento. En materia de movilidad, el gasto en gasolina registró una variación negativa de 1.0 por ciento”, muestra el reporte.
No obstante, el análisis realizado por la economista principal de BBVA, Saidé Salazar, destaca que el consumo continúa mostrando una evolución positiva, pues de enero a julio de este año el gasto privado ha registrado un crecimiento de 11.8 por ciento, respecto al mismo periodo del año anterior.
Además, estiman que el consumo siga con una evolución positiva impulsada por las ganancias en salario real y el empleo.
“Anticipamos que el consumo continuará mostrando el mejor dinamismo dentro de los componentes de la demanda interna, y que mitigará el menor crecimiento de otros sectores de la economía, ante la gradual ralentización de la demanda externa”, señaló BBVA.