La inflación es el alza generalizada y sostenida de los precios, y con la reanudación de la actividad económica tras la pandemia se han observado niveles elevados en todo el mundo.
En México, su punto más alto se observó entre agosto y septiembre del 2022, cuando se ubicó en 8.70 por ciento anual y aunque desde entonces se ha moderado paulatinamente hasta ubicarse en 4.45 por ciento en septiembre de este año, todavía está en niveles elevados.
Las razones de una inflación elevada en México
La razón detrás de la alta inflación se debe a que los servicios han sido más renuentes ante una demanda elevada que se explica por el aumento al salario, un mercado laboral sólido y también por las transferencias monetarias que realiza el gobierno mediante los programas sociales.
Del lado de las mercancías, si bien se ha visto cierta moderación, en un inicio fueron las que ejercieron presión para provocar una alta inflación, debido a que las cadenas de suministro sufrieron interrupciones, pero ante la apertura de la actividad dichos choques se han desvanecido.
Ambos componentes, servicios y mercancías, conforman a la inflación subyacente que es una guía de la tendencia de los precios en el mediano plazo, y desde febrero se ha desacelerado para ubicarse en 5.76 por ciento anual en septiembre.
No obstante, en semanas recientes han surgido presiones del lado de los energéticos con los aumentos en el precio del petróleo y los cuales podrían entorpecer el descenso de la inflación; también destacan las presiones en los productos agropecuarios como frutas, verduras y productos pecuarios y podría afectar la formación de precios ante el fenómeno climático de El Niño.
Este rubro que da forma a la inflación no subyacente se situó en 0.60 por ciento anual en septiembre, su segundo mes acelerándose, según los datos del INEGI.
Otro de los aspectos por los que la inflación sigue elevada se debe al retraso con el que se manifiestan los incrementos a la tasa de referencia de Banxico, cuyo ciclo alcista inició en junio del 2021 y concluyó en marzo de este año. En ese periodo, la tasa clave pasó de 4.00 a 11.25 por ciento.