Aunque las remesas y los ingresos petroleros gozan de una gran popularidad por la cantidad de divisas que atraen al país, la venta de productos eléctricos y electrónicos son el segundo sector de la economía mexicana que más ‘dólares’ deja en el país, solo por debajo del sector automotriz.
En 2022, la venta de productos eléctricos y electrónicos marcó un récord histórico de 85 mil 321 millones de dólares, lo que representó un incremento anual de 11.6 por ciento, según datos del Banco de México.
Los ingresos de dólares al país solo son superados por el sector automotriz, quienes durante el año pasado dejaron una derrama económica por 165 mil 231 millones de dólares.
La venta de productos eléctricos y electrónicos superó los 58 mil 510 millones de dólares de las remesas que entraron al país durante el año pasado.
También fueron superiores a los 38 mil 972 millones de dólares que dejan las ventas del petróleo.
Otro dato interesante es que las ventas de productos eléctricos y electrónicos superan las divisas que generan el sector minerometalúrgico (20 mil 339 millones de dólares), agropecuario (21 mil 191 millones de dólares) y el turismo (26 mil 347 millones de dólares), juntos.
Durante el primer semestre de 2023, México ha exportado 50 mil 332 millones de dólares en productos eléctricos y electrónicos, por lo que tiene una pinta de superar el récord histórico de 2022.
Salvador Portillo, presidente de la CANAME, señaló que el sector eléctrico contribuye de forma importante en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) gracias a que los productos mexicanos son muy competitivos y requeridos en la región de Norteamérica.
“El mercado más relevante para nosotros es Estados Unidos, entre los productos que más exportamos se encuentran transformadores de potencias, cables de potencia, reguladores de voltaje, transformadores, instrumentos y tableros”, dijo.
Resaltó que los mercados mundiales confían en los productos hechos en México ya que el sector cumple con diversas normatividades a nivel local e internacional, lo que hace a los productos muy competitivos en precio, seguridad y en tiempo de entrega.