El proceso desinflacionario en el país podría ir más lento de lo que el Banco de México (Banxico) estima, pues incluso podría darse un poco después del 2025, proyectó José Luis Ortega, director de inversiones activas en BlackRock México.
Detalló que en el contexto internacional hay condiciones que mantendrán un ambiente de bajo crecimiento y alta inflación, lo que influirá en altas tasas por un periodo prolongado: cambios en las cadenas de producción, envejecimiento de la población (lo que baja la producción laboral) y la transición energética.
“Creemos que va a tardar más tiempo en converger. Nuestros modelos internos nos dan una convergencia más lenta y nos va a dar mucho gusto que nos equivoquemos y que el Banco de México esté en lo correcto y si lleguemos a ese 3.0 por ciento en el segundo trimestre de 2025, pero actualmente todavía somos un poco más cautelosos”, refirió.
El organismo monetario contempló que será en el segundo trimestre de 2025 cuando logren llevar la inflación a la meta de 3.0 por ciento, luego de que se ha visto un proceso desinflacionario en el país. Esto derivó en que puedan poner sobre la mesa un recorte a la tasa de referencia, hoy en 11.25 por ciento, en el primer trimestre del año.
Al respecto, el directivo de la gestora de activos coincidió en que la Junta de Gobierno de Banxico hará un ajuste fino al referencial en las primeras reuniones del próximo año dado el alto nivel de la tasa real ex ante arriba de 7.0 por ciento. A su vez, respaldó la idea de que serán reducciones graduales para ver cómo reacciona la inflación.
Respecto al déficit fiscal planteado para el próximo año, de 4.9 por ciento del PIB, el director de inversiones activas en BlackRock México aseguró que es manejable, pero si se mantuvieran en el largo plazo si se verían retos importantes.
En términos generales, puntualizó que los bancos centrales del mundo no serán tan proclives en bajar tasas el próximo año. “Ya llegamos al nivel máximo de tasas. Va a ser el ritmo de bajada lo que determine el comportamiento de los mercados y economías hacia adelante”.
Economía mexicana al alza
Por otro lado, José Luis Ortega consideró que la economía mexicana puede mostrar un dinamismo similar al visto este año para 2024 y crecer 3.0 por ciento; sin embargo, el riesgo para que esto no ocurra depende de su socio comercial Estados Unidos.
“El gran riesgo que podremos ver es una desaceleración más fuerte en la economía de Estados Unidos. Si fuera un escenario recesivo en Estados Unidos, seguramente sería un problema para la economía por la alta dependencia. No es nuestro escenario”, aclaró.
Un catalizador para la economía mexicana será la relocalización de empresas, también conocida como nearshoring. Sergio Mendez, director general de BlackRock México, indicó que se podrían hacer más cosas para aprovechar esta tendencia en el país, pero se hace un buen trabajo.
“De las cosas que más se necesitan, a nivel mundial y no solo México, es la inversión en infraestructura, logística, justamente para poder poner las diferentes estrategias que van a facilitar o fomentar el libre flujo de bienes para la economía”.
Enfatizó, por último, que México es de los países más beneficiados por el nearshoring, al igual que Japón e India.