La existencia de los organismos autónomos ha permitido la llegada de las inversiones por la relocalización de cadenas productivas, el fenómeno conocido como nearshoring, destacó el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Estos organismos generan un ambiente de garantía de respeto a los derechos humanos, la transparencia, la regulación y la competencia económica, dijo el organismo en respuesta a la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador de eliminarlos.
El CCE también remarcó que los organismos autónomos figuran en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que el Gobierno federal se comprometió a respetar.
“En las últimas dos décadas los órganos reguladores han sido instrumentos para fortalecer la democracia y la competitividad del país. Sin ellos, México no estaría beneficiándose de la inversión y de la generación de empleos derivados de la relocalización”, expuso el CCE.
“Desde el sector empresarial, seguiremos apoyando el fortalecimiento de las instituciones, con el objetivo de mejorarlas por el bien de México, de sus ciudadanos y de nuestra democracia”, señaló el organismo empresarial.
El CCE afirmó que los órganos autónomos constitucionales fueron creados para desarrollar funciones específicas y especializadas del Estado mexicano.
“Su autonomía les permite cumplir las funciones constitucionales de manera más eficaz, eficiente e independiente de intereses políticos o económicos”, agregó la máxima cúpula empresarial del país.
¿Qué dijo AMLO sobre los organismos autónomos?
El lunes pasado, el presidente López Obrador adelantó que enviará una iniciativa de reforma constitucional al Congreso para eliminar a los organismos autónomos como el INAI y la Comisión Federal de Competencia (Cofece) a los que acusó de “no servir para nada”.
“Esa es otra iniciativa de ley que quiero enviar: cómo desmontar todo ese aparato que crearon paralelo al Gobierno para tener el control de todas las decisiones del poder público; que el Instituto de la Transparencia, que el Instituto de Comunicaciones, que el Instituto de Competencia, que la CRE, que no sé cuánto”, dijo en la ‘mañanera’ del 11 de diciembre.
Al tratarse de un cambio a la Constitución, la nueva iniciativa de López Obrador necesitaría ser aprobada por mayoría calificada en el Congreso de la Unión, es decir, por las dos terceras partes de las cámaras. Morena y aliados no tienen esa mayoría en San Lázaro, por lo que la propuesta fracasaría.
El mandatario reconoció este obstáculo, pero adelantó que aún así enviará su propuesta, aunque no aclaró el cuándo.
“Si no la aprueban, lo que quiero es que quede constancia de que eso está mal y no quiero ser cómplice”, señaló.