Petróleos Mexicanos (Pemex) identificó desde esta mañana que circulaban en internet presuntos datos de sus proveedores, sin embargo, tras una primera revisión, se consideró que esas listas eran falsas, ya que incluyen información que no corresponde a la realidad, explicó la petrolera a El Financiero.
Sin embargo, Pemex seguirá investigando de dónde surgieron estos datos, con el objetivo de divulgar una postura oficial en los próximos días.
De manera puntual, la cuenta de Guacamaya Leaks publicó en la red social X, antes Twitter, que se habían filtrado en la web el sistema de facturación electrónica de la compañía, con lo que se había expuesto la información de todos sus proveedores.
En una captura de pantalla, se puede observar que se publicaron datos de presuntos proveedores de la Empresa Productiva del Estado, como lo es nombre del responsable, domicilio, teléfonos, localidad, números de cuenta, contraseñas, entre otros.
Nueva filtración de datos de @Pemex esta vez es el sistema de facturación electrónica y expone la información de todos sus proveedores.#GuacamayaLeaks #GuacamayaNews #Pemex #AMOL#NarcoPresidenteAMLO pic.twitter.com/33AnSL352o
— Guacamaya Leaks (@GuacamayanLeaks) February 10, 2024
Desde 2021, Pemex da a conocer públicamente en su sitio web un reporte mensual sobre los pagos y adeudos con proveedores y contratistas, en los que se específica cuánto le deben a cada uno de ellos, así como el nombre de la empresa y su razón social.
“Por medio de este sitio, la ciudadanía puede acceder a la información del Portal Público de Contratos de Abastecimiento donde encontrará la versión pública de contratos de bienes, arrendamientos, obras y servicios formalizados por la empresa”, se puede leer en el portal de la petrolera.
Pemex ya ha sufrido ataques cibernéticos durante la actual administración. En noviembre de 2019, un hacker logró infiltrarse en los equipos de la petrolera con lo que logró obtener documentos e información y afectar el funcionamiento del 5 por ciento de los equipos personales de cómputo.
En ese entonces, diversos empresarios no podían realizar pedidos a la petrolera, mientras que las terminales de almacenamiento y distribución estaban congeladas, ya que varios de los trabajadores no podían acceder al sistema informático de logística.
Un año después, en noviembre de 2020, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) evaluó que el sistema informático de Pemex seguía siendo vulnerable a un incidente de inseguridad, ya que sus sistemas operativos se encontraban desactualizados.