Economía

Cofece ‘da permiso’ a AMLO para comprar plantas de Iberdrola... pero con 4 condiciones

La Cofece impuso ‘requisitos’ al Fonadin para autorizar la compra de 13 plantas de la empresa española, esto para garantizar que la competencia en el mercado eléctrico no se verá afectada.

El Gobierno acordó la compra de 13 plantas de Iberdrola por un monto de 6 mil millones de dólares (Sergio Rojo / Shutterstock.com)

El Pleno de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) informó este jueves que permitirá la compra de 13 plantas de generación de energía eléctrica de Iberdrola... siempre y cuando se cumpla una lista de condiciones, con el objetivo de que no se generen riesgos a la competencia.

“El cumplimiento de estas condiciones garantizará que la competencia económica del mercado de la generación eléctrica no se vea afectada”, indicó la Cofece.

¿Cuáles son las condiciones impuestas por la Cofece?

El Pleno señaló que los compradores están obligados a operar las plantas de generación de manera independiente en el mercado, y evitar intercambios de información sensible o estratégica entre competidores.

El Pleno de la Cofece impuso cuatro condiciones principales:

  • El Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) o sus partes vinculadas en la operación deberán reducir y mantener su inversión en un máximo de 51 por ciento, lo cual debe concretarse en un plazo de 24 meses.
  • Se debe designar a un administrador profesional independiente, quien será el encargado de tomar decisiones relativas a la operación de las plantas de generación eléctrica en el mercado.
  • Se deben establecer controles para que las decisiones relativas a la administración de las plantas de generación eléctrica únicamente puedan ser adoptadas mediante votaciones calificadas o con intervención obligatoria de inversionistas institucionales o miembros independientes.
  • Se deben establecer controles y mecanismos que obliguen a las personas encargadas de la operación de las plantas de generación eléctrica a actuar con independencia y sin conflicto de interés.

Con la finalidad de obligar a los compradores a evitar intercambios de información sensible o estratégica entre competidores, se deberá designar a un oficial de cumplimiento totalmente independiente a las partes que verifique y garantice esta situación.

Además, los directivos y personas encargadas de la operación de las plantas de generación eléctrica deberán abstenerse de tener cargos en algún otro competidor. No podrá nombrarse para esas posiciones a personas que hayan sido servidores públicos en los últimos cuatro años.


Por lo tanto, las condiciones impuestas por el Pleno de la Cofece obligan a los compradores a garantizar que, pese a la inversión del Fonadin en la operación, las plantas de generación eléctrica operarán de manera autónoma e independiente en el mercado.

Estas condiciones tienen una vigencia de 10 años y serán constantemente verificadas por la Cofece a través de diversos mecanismos establecidos en la resolución”, agregó.

¿Qué sabemos de la compra de 13 plantas de Iberdrola?

Los compradores deberán aceptar de manera expresa e incondicional las condiciones establecidas por el Pleno de la Cofece para poder cerrar la operación y, en caso de que incumplan las condiciones una vez aceptadas, se podrán imponer las sanciones establecidas en el artículo 127 de la Ley Federal de Competencia Económica.

El Gobierno de México llegó a un acuerdo con Iberdrola el 4 de abril de 2023 para adquirir 13 centrales eléctricas por un costo de 6 mil millones de dólares. 12 de ellas utilizan tecnología de ciclo combinado y una funciona con energía eólica.

Durante el anuncio, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que las plantas serán adquiridas por el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) y serían operadas por la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Con el anuncio, López Obrador afirmó que la CFE podría aportar alrededor del 65 por ciento de la generación eléctrica del país, aunque meses más tarde, Manuel Bartlett, director general de CFE, declaró que para finales de sexenio, la empresa energética contribuiría con 61 por ciento del total de la capacidad instalada de México. Actualmente, esa cifra está en 54 por ciento.

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