La creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar es una medida populista que sí ayudará a la gente, pero, al mismo tiempo, creará un problema de finanzas públicas, advirtió Alberto Tovar, especialista en negocios y finanzas personales de El Financiero, previo a la firma del acuerdo del presidente Andrés Manuel López Obrador con el que entrará en vigor esta reforma.
En el marco a la conmemoración por el 1 de Mayo, Día del Trabajo, López Obrador indicó que firmará la reforma para que toda la ciudadanía tenga una pensión digna; sin embargo, Tovar advirtió que el Fondo de Pensiones para el Bienestar podría ser un problema heredado a los próximos gobiernos.
“Sumarle al gobierno federal un exceso de gasto es una medida populista. Sí ayuda a la gente, sin lugar a dudas, pero generando una problemática de finanzas públicas que se va a agravar poco a poco e irá pasando a los siguientes gobiernos”, señaló el especialista.
Tovar detalló que uno de los problemas del Fondo de Pensiones para el Bienestar es que se financiara por recursos del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado o de las utilidades que generen entidades paraestatales sectorizadas como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) o el Tren Maya, las cuales aún no son rentables.
“Lo que el gobierno plantea es que van a tomar recursos del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, así como las utilidades del AIFA y del Tren Maya, lo cual sabemos que, por el momento, son deficitarios y hay que inyectar los recursos”, explicó.
La reforma de creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar plantea que alrededor de 40 mil millones de pesos de cuentas de Afore inactivas se tomarán para alimentar este fondo. El objetivo es que las personas en edad de retiro puedan tener una pensión igual a su último salario como trabajadores, con un tope de hasta 16 mil 777 pesos mensuales. No obstante, ese presupuesto probablemente no alcanzara para todos los trabajadores.
“Habrá un problema para las finanzas públicas al pagar a todos los trabajadores que se quieran jubilar. Por ahí del 2045 y 2050 se van a empezar a jubilar el grueso, la pregunta es si esos cuarenta mil millones de pesos van a alcanzar”, resaltó el especialista.
Fondo de Pensiones para el Bienestar busca compensar la Ley del 97
El candidato a senador por Morena en Nayarit, Miguel Pável indicó que esta reforma beneficiará a las personas que comenzaron a trabajar después de la ley del 97 y a los trabajadores a quienes les alcanzó la reforma del 2007.
“Lo que se plantea fundamentalmente es tener un fondo de compensación para que los trabajadores que empezaron a laborar y que la ley del 97 los alcanzó, así como a los trabajadores que los alcanzó la reforma del 2007, los chambeadores del Seguro Social y del ISSSTE, puedan tener una pensión más digna con el 100 por ciento de su último salario”, destacó.
Pável descartó que el Fondo de Pensiones para el Bienestar sea un riesgo, puesto que, dijo, no se planea que el gobierno tome los fondos de pensiones a las Afores para crear un sistema único.
“Lo que se está planteando es que este Fondo se construya, de la liquidación de algunas instancias del Gobierno de la República, así como de las ganancias de proyectos estratégicos, como el Tren Maya, el Aeropuerto Felipe Ángeles y Mexicana de Aviación.
“También se está planteando que ese Fondo se pueda constituir con adeudos que se tienen de instituciones públicas, con el SAT o con el mismo ISSSTE, que son entes públicos”.
Añadió que, “las cuentas inactivas van a pasar al Seguro Social, Hacienda, el Banco de México, quienes tendrán el control del Fondo de Pensiones para el Bienestar que va a compensar a los trabajadores”.
Finalmente, el economista Alberto Tovar consideró que el Fondo de Pensiones para el Bienestar rompe la viabilidad financiera del país. “No es positivo llevar a cabo esa reforma de esa manera, sobre todo, porque esto puede llevar a un tema de problemas de déficit fiscal, que pueda llevar, eventualmente, a procesos inflacionarios que en México han sido costosos”, finalizó.