El peso se mantendrá en calma ante el proceso electoral que se realizará en junio, sin embargo, estará sujeto a los movimientos que haga el Banco de México (Banxico) a la tasa de referencia y el diferencial de tasas respecto a la Reserva Federal (Fed).
Durante su participación en El Financiero Meet Point Virtual, Valentín Martínez Rico, vicepresidente de oferta de valor Sura Investments, recordó que tradicionalmente previo a los comicios había una depreciación de la moneda mexicana y posteriormente se daba un periodo de apreciación.
“Parece ser que desde esta óptica no hay mucha preocupación por el entorno electoral (de México), podríamos decir que hay confianza en que esto se va a llevar de una forma ordenada”, dijo Martínez Rico.
No obstante, tras las elecciones, el experto dijo que el mercado va a estar atento a la composición del Poder Legislativo y dependiendo hacia donde se incline puede generar algo de movimiento en la divisa.
Hasta el cierre del jueves, el tipo de cambio se ubicó en 16.6818 unidades por dólar, cerca de 30 centavos por debajo del cierre del 2023.
La clave de la apreciación ha sido el diferencial de tasas y será este mismo factor el que provoque una leve pérdida hacia delante cuando se den los recortes, indicó Martínez Rico. Actualmente, el diferencial de tasas entre Banxico y la Fed es de 450 puntos base, pero a medida que Banxico recorte tasas el spread se reduce y también el atractivo ante los ojos de los inversionistas.
Otros factores que podrían provocar una reacción del peso es que Banxico dé indicios de ser más agresivo en sus recortes; además, el ruido geopolítico y las elecciones de Estados Unidos.
“La moneda mexicana estará fluctuando entre 16.50 y 17.50 (unidades por dólar) y en un caso extremo podríamos ver 18.50, pero aquí tendrían que conjugarse muchas de estas variables”, dijo Martínez y estimó que la tasa de Banxico podría cerrar el año en 10.0 por ciento.
Banxico, antes que la Fed
Respecto a los movimientos a la tasa de interés, los expertos estiman que Banxico reanude sus recortes antes que la Fed inicie el suyo.
Martínez Rico prevé que Banxico haga de cuatro a cinco recortes, con lo que finalizará el año entre 9.75 y 10.00 por ciento. “El 11.00 por ciento en las condiciones actuales parece no ser necesario y aun recortando cuatro veces para llegar a 10.00 por ciento no estamos hablando de que la tasa esté en un ciclo de política monetaria expansiva o laxa”, dijo.
Elijah Oliveros-Rosen, economista jefe para mercados emergentes en S&P Global Ratings, prevé que el ciclo de recortes de Banxico será pausado y no descarta que los movimientos sean hasta el cierre del año, similar a la Fed.
“Banxico mandó una señal muy fuerte al mantener la tasa sin cambios; quedan cinco reuniones este año y vemos que en las próximas tres es muy probable que la mantengan, y en las últimas dos hagan un recorte, será un proceso muy lento que se va a extender hasta el 2026″, dijo a El Financiero Bloomberg.
En el caso de la Fed, Marina Valentini, estratega global en JP Morgan Asset Management, dijo que irá con más cautela en su ciclo de recortes, donde el primero lo haría hasta septiembre con el objetivo de calibrar las tasas ante una economía fuerte.
Si la Fed hace un par de recortes de 25 puntos base en lo que resta del año, la tasa se ubicaría entre 4.75 y 5.00 por ciento.
“En Estados Unidos no estamos viendo presiones del crecimiento del salario a pesar del mercado de trabajo muy sólido. Creemos que poco a poco a lo largo de este año y el próximo llegaremos a la meta de 2.0 por ciento, pero no es una línea recta, es un proceso muy gradual”, dijo Valentini.
Llegar a la meta
Para que sucedan los recortes a la tasa de interés, la inflación tendrá que ceder, trayectoria que se vio interrumpida en meses recientes. Sura Investments prevé que en México la inflación cierre en 4.2 por ciento. JP Morgan prevé que en Estados Unidos se aproxime a la meta de 2.0 a mediados del 2025, desde el 2.7 por ciento actual.
Martínez Rico reconoció que sí ha funcionado la política monetaria en ambos países, pero indicó que “el debate es si en el corto plazo vamos a alcanzar los objetivos de los bancos centrales y parece que esto va a llevar un poco más de tiempo”.
La Fed prevé que sea hasta el 2026 cuando se logre el 2.0 por ciento puntual. Banxico estima que la convergencia a la meta de 3.0 por ciento se logre hasta el cuarto trimestre de 2025.