La reelección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos podría tener graves consecuencias para la economía mexicana, según advirtieron expertos.
De acuerdo con Dana Bodnar, economista de Atradius, el posible retorno del republicano a la Casa Blanca, y con ello la implementación de su agresiva política comercial, tendrían un impacto negativo que llevaría al Producto Interno Bruto (PIB) de México a ser hasta 2 por ciento menor en 2026, así como mantener estancada la Inversión Extranjera Directa (IED) en menos de 30 mil millones de dólares durante su mandato, en comparación con un escenario bajo una administración de Kamala Harris.
“México sufriría las consecuencias más severas de una reelección de Trump en el corto plazo. El PIB mexicano sería más de un 2 por ciento menor en 2026 que bajo el gobierno de Harris, y terminaría un 1 por ciento más bajo en 2028″, indicó Bodnar.
La economista explicó en su análisis que el eje central de la política comercial de Trump se basaría en la imposición de fuertes aranceles a los bienes importados, no solo desde China, sino también desde otros socios comerciales importantes de Estados Unidos.
Según las proyecciones, estos aranceles llegarían al 60 por ciento para los productos chinos y al 10 por ciento para otros países clave, como México. Esta medida, sumada a las respuestas de represalia esperadas de los socios comerciales afectados, arrastraría al comercio global, reduciendo el volumen de las exportaciones de bienes en un 4 por ciento a nivel mundial para el final de su mandato en 2029, en comparación con Harris.
Impacto directo
Jason Tuvey, jefe adjunto de mercados emergentes en Capital Economics, advirtió que las recientes amenazas de Trump de imponer aranceles al sector automotriz de México podrían ser solo una táctica preelectoral o una estrategia para obtener concesiones. Sin embargo, si se implementan, impactarían gravemente a la economía mexicana, provocando una caída de hasta 0.6 por ciento del PIB real por cada 10 por ciento de disminución en las exportaciones de vehículos.
“Aún más preocupante es que estos aranceles podrían ser el preludio del desmantelamiento del T-MEC”, y explicó que existe el riesgo de que los aranceles también cubran las piezas de vehículos. Las piezas a menudo cruzan la frontera hasta ocho veces, por lo que existiría la amenaza de una importante acumulación de aranceles. “Las cadenas de suministro se volverían inviables”, agregó.
En contraste, Esteban Polidura, director de Estrategia de Inversión para las Américas en Julius Baer, destacó que “aunque la política comercial de Trump es más intensa que la de Harris, descartan impacto en el PIB de México.
“Si bien existe un riesgo real de que los aranceles afecten el comercio, también es posible que los recortes de impuestos en EU impulsen el crecimiento, lo que podría beneficiar indirectamente a México”, indicó.
El experto prevé para EU un crecimiento adicional de 0.5 por ciento en 2025 con respecto a un escenario diferente. La economía mexicana podría capturar ese crecimiento adicional el próximo año, e incluso más si el enfoque comercial de Trump se concentra en China en vez de México.
Parálisis: Moody’s
Por su parte, Moody’s Ratings alertó que si Estados Unidos impusiera un arancel general de 10 por ciento a todas las importaciones mundiales en el primer año de Trump, la economía mexicana se vería paralizada en 2025 y se recuperaría lentamente hacia 2026.
De materializarse, también afectaría a la propia economía estadounidense, dijo; sin embargo, la preocupación de que sirva de “puerta trasera” para las exportaciones chinas es ya un tema destacado en los círculos políticos demócratas y republicanos.
Moody’s Ratings insistió en que las fricciones sobre el aumento del contenido chino incorporado en las exportaciones de México a Estados Unidos podrían desencadenar rondas de aranceles de represalia. “Una guerra comercial limitada podría descarrilar las economías de Estados Unidos y México”, señaló.