Steven Madden está acelerando sus planes para trasladar producción fuera de China después de que la victoria de Donald Trump en las elecciones en EU aumentó las probabilidades de un aumento de los aranceles a los productos importados.
El minorista de calzado ahora apunta a disminuir los productos fabricados en China en 40 por ciento durante 2025, frente a su objetivo anterior de una reducción del 10 por ciento.
“A partir de ayer por la mañana, estamos poniendo en marcha ese plan”, señaló Edward Rosenfeld, CEO de Steven Madden, en una conferencia telefónica con analistas sobre resultados el jueves 7 de noviembre.
Las empresas de consumo se están precipitando a adelantarse a los posibles aranceles y advierten sobre el impacto que pueden tener en el precio de los productos cotidianos en EU.
En la campaña a la Presidencia, Trump amenazó con imponer aranceles a China de 60 por ciento a productos importados de ese país, y de hasta 20 por ciento a los artículos procedentes de otros países, para fomentar la producción nacional. Las empresas con sede en Estados Unidos han dependido durante mucho tiempo de las fábricas chinas porque pueden producir bienes a menor costo.
“Si estamos contemplando una nueva política que implica una guerra comercial con China, eso tendrá todo tipo de implicaciones de gran alcance, no solo en la cadena de suministro, sino en la economía en general”, comentó Rosenfeld a los analistas.
Los compradores en EU serán los afectados por los aranceles de Trump
Whirlpool, que fabrica los electrodomésticos Maytag y Amana, advirtió que los estadounidenses deben prepararse para enfrentar precios más altos de los microondas si se incrementan los aranceles.
“Lo más grande que sacamos de China son microondas”, afirmó el director financiero, Jim Peters, en una entrevista antes de las elecciones. Al mismo tiempo, Peters aclaró que Whirlpool está más aislada del riesgo que otros fabricantes porque la mayoría de los productos que vende en EU los produce localmente.
Church & Dwight ya ha trasladado parte de su producción fuera de China, sobre todo de su negocio de cuidado bucal Waterpik.
“Hay planes en marcha y acciones que hemos tomado para mitigar ese impacto”, afirmó la semana pasada el director financiero, Rick Dierker, en respuesta a una pregunta sobre los aranceles a inversiones chinas. “Al igual que todo el mundo, somos muy conscientes de las implicaciones que hay”.
En Steven Madden, cerca de la mitad de su negocio actual estaría potencialmente sujeto a aranceles sobre las importaciones chinas. Si el plan de la empresa para mitigar su exposición tiene éxito, eso se reduciría a alrededor de 25 por ciento en el próximo año.
Steven Madden ha ido desplazando su cadena de suministro hacia Camboya, Vietnam, México y otros países.