CHIHUAHUA, Chihuahua.- Un caos se generó en la ciudad de Chihuahua desde temprana hora de este martes, cuando los automovilistas comenzaron a saturar las estaciones expendedoras de gasolina, ocasionando largas filas al exterior de los establecimientos.
El problema se presentó debido al cierre de las estaciones de una de las principales cadenas gasolineras de la capital del estado, la cual al dejar de surtir al 30 por ciento de la ciudad, detonó compras de pánico, y causó que se registrara una sobredemanda de combustible, ya que, a decir de los gasolineros, de 2 millones de litros de gasolina que en promedio se vendían diariamente, ahora las estadísticas de venta superan los 4 millones de litros por día.
Esta situación obligó a que los cientos de automovilistas que requerían cargar combustible prolongaran por más de tres horas la espera para poder ser atendidos.
Más tarde, ciudadanos llegaron caminando a hacer fila alrededor de las gasolineras para llenar garrafones y botellones plásticos con el combustible.
El problema creció de tal modo que los propios ciudadanos bloquearon e impidieron el acceso de las unidades de emergencia a las bombas de gasolina, en donde se dijo que éstos tenían prioridad: unidades de la policía municipal y estatal, así como ambulancias.
Cerca del mediodía, comenzaron las tomas de pipas de Pemex por parte de ciudadanos en diferentes sectores de la ciudad, acciones que pretendían ejercer presión para exigir a los operadores que les surtieran el combustible.
Cabe mencionar que ante esto, Petróleos Mexicanos manifestó que en Chihuahua se cuenta con un abasto ordinario y pidió a la ciudadanía minimizar su consumo, evitar las compras de pánico y permitir que la situación se regule de manera paulatina.