CIUDAD DE MÉXICO.- El poder que le dio la reforma fiscal al Servicio de Administración Tributaria (SAT) para realizar actos de fiscalización, dio resultados: la recaudación por esta vía aumentó 26.6 por ciento real en un año a 156 mil 398 millones de pesos, la cifra más alta en ocho años, periodo desde el cual reporta el SAT.
"Por cada peso erogado en acciones de fiscalización se logró recuperar la cifra de 55.2 pesos, la rentabilidad más alta registrada", detalló el SAT al hacer público su Informe Tributario y de Gestión del cuarto trimestre de 2014.
El aumento obedece a mayores acciones de la autoridad para evitar la evasión de impuestos y actos ilícitos. Entre éstas destacan el cruce de información de declaraciones con referencias de emisores de facturas electrónicas, como restaurantes y empresas turísticas.
El intercambio de datos con bancos ha sido importante para incrementar la fiscalización, refirieron expertos. También el SAT se ha enfocado en actos para incrementar la recaudación, como la publicación de listas de contribuyentes incumplidos, "eso ha sido un éxito para la autoridad, porque las personas al verse en esas listas ven venir una auditoría", además que pueden verse afectadas sus relaciones con clientes y proveedores, dijo Gabriel Pérez del Peral, director de la Escuela de Economía de la Universidad Panamericana.
"Los mayores actos de fiscalización se debieron a revisiones del IVA muy profundas, también a una campaña contra proveedores de servicios inexistentes, búsqueda de empresas fraudulentas; esto tuvo un gran impacto en actos de fiscalización o recaudación", detalló por su parte Pedro Carreón, socio líder de Análisis y Estrategia de Política Fiscal de PwC.
En 2014, el IVA devuelto fue 13 por ciento menor que en 2013.
MÁS ACTOS EN 2015
Los actos de fiscalización en 2014 sumaron 112 mil 535, cifra 1.2 por ciento mayor al número en 2013.
Para el ejercicio de 2015 se espera que aumenten, por el avance del nuevo sistema tributario que contempla el cumplimiento de la contabilidad electrónica, el uso del buzón tributario y la revisión, auditoría, liquidación, cobro y embargo vía digital del SAT. Además, el contexto de la disminución en los precios del petróleo, y por ende menores ingresos para la Federación, impulsará a la autoridad a incrementar la fiscalización y la recaudación de ingresos tributarios no relacionados con el petróleo, consideró Carreón.
"La caída de los ingresos petroleros es de largo y mediano plazos; ante ese contexto tan sombrío, en cuanto a ingresos, veremos más actos de fiscalización, para, de alguna manera, compensar esta baja de ingresos", dijo Pérez del Peral.
En tanto, el índice de percepción de la corrupción en el SAT fue de 28.3 por ciento, cuando en 2013 fue de 26.1 por ciento.
Según comentarios de contribuyentes entrevistados, esto puede atribuirse "a su mala percepción asociada a los recientes temas políticos del país de alto nivel mediático, así como las constantes inconformidades respecto a la reforma fiscal, situaciones que impactan y hacen más vulnerable la medición de las percepciones críticas de existencia de corrupción en la institución, que si bien es un indicador específico del SAT, reacciona a temas desfavorables del gobierno federal", precisó.