Estados Unidos está en su séptimo año consecutivo de expansión, sin embargo el Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó su pronóstico de crecimiento para este 2016 a 2.2 por ciento desde un 2.4 por ciento estimado en abril pasado y 2.6 por ciento previsto en enero; para 2017 mantuvo estable su pronóstico en 2.5 por ciento.
Al concluir la evaluación del Artículo IV, el Consejo Directivo del FMI señala que los riesgos para las perspectivas de crecimiento se inclinan a la baja debido a la incertidumbre circundando las implicaciones del referéndum en el Reino Unido, la continua volatilidad en los mercados financieros y una mayor apreciación del dólar.
Un riesgo a la baja más complejo y perjudicial es la posibilidad de que la tasa de crecimiento potencial sea menor a lo estimado.
Su pronóstico para la inflación es de 1.1 y 2.5 por ciento para 2016 y 2017, respectivamente.
Hasta ahora, la tasa de desempleo ha caído a 4.9 por ciento y la riqueza de los hogares está cercana a los niveles precrisis.
Sin embargo, la economía ha pasado por una caída temporal de crecimiento en los dos últimos trimestres. Precios más bajos del petróleo condujeron a una nueva contracción de la inversión en el sector energético y un dólar fuerte y la débil demanda han pesado sobre las exportaciones netas.
Tras una contracción estimada en 40 por ciento durante el 2015, en 2016 la inversión en energía se estima caiga otro 30 por ciento, recortando un 0.2 por ciento al crecimiento.
Sobre el impacto en el crecimiento de la economía estadounidense por una disruptiva salida del Reino Unido de la Unión Europea, el FMI dijo que sería modesto.
El principal canal podría ser a través de un sostenido incremento de la aversión global al riesgo que podría dirigir una compresión de los bonos soberanos estadounidenses, un incremento del dólar y la venta de activos de riesgo.
"Sin embargo, debido a la naturaleza sin precedentes del evento, el grueso de efectos entre ellos en la economía estadounidense y su sistema financiero son altamente inciertos".
En el lado positivo, el ingreso real disponible de los hogares está creciendo a un tres por ciento, el mercado inmobiliario se desempeña a un ritmo saludable y la mezcla actual de política monetaria y fiscal está soportando la economía.
Los directores del equipo del FMI acordaron que el ritmo de la normalización de las tasas de interés deberá permanecer dependiente a los datos, procediendo cautelosamente en el largo camino alcista.
Sin embargo, hubo algunos directores preocupados por los riesgos de las expectativas del anclaje de la inflación erosionando la credibilidad de la política monetaria.
También subrayaron la importancia de mantener una comunicación clara y efectiva del enfoque de ajuste de la tasa de interés.
SISTEMA BANCARIO SÓLIDO
Tras reconocer un fortalecimiento del sistema bancario estadounidense producto de las recientes reformas regulatorias y la mejora de las posiciones de capital, los directores del FMI señalaron que siguen existiendo focos de vulnerabilidades que justifican una vigilancia continua, en particular en las industrias de gestión de activos y seguros, aunque en la coyuntura actual, los riesgos son poco probables que sean sistémicos.
Para preservar los logros conseguidos con tanto esfuerzo en la estabilidad financiera, el FMI pidió a las autoridades que continúen implementando las recomendaciones del Programa de Evaluación del Sector Financiero 2015.