La inflación anual en México se aceleró a 3.29 por ciento en la primera quincena de noviembre, impulsada principalmente por los incrementos en los precios de las mercancías, donde es cada vez más evidente el impacto del tipo de cambio.
Los analistas prevén que los precios al consumidor continuarán en una trayectoria ascendente en los próximos meses ante un mayor traspaso del dólar más caro sobre los precios de algunos bienes (pass-through).
La mayor variación en precios se dio en el segmento de las mercancías, en específico en alimentos, bebidas y tabaco, donde la inflación llegó a 4.22 por ciento.
Sin embargo, las mercancías distintas de alimentos —cuyos precios son más susceptibles a las variaciones del tipo de cambio— reportaron la más grande inflación en cerca de cuatro años, con 3.95 por ciento.
En general el incremento anual en precios de mercancías fue de 4.07 por ciento, que enmarca el mayor nivel inflacionario para el segmento desde la segunda quincena de enero de 2013.
Analistas de Banamex indicaron en un reporte que los resultados denotan mayores presiones inflacionarias, las cuales podrían continuar en los siguientes meses, ante el mayor debilitamiento del peso en las recientes semanas.
"Ello implica riesgos al alza para nuestro pronóstico de la inflación general para el cierre de 2016 de 3.2 por ciento. En tanto, nuestra expectativa de inflación para el 2017 recientemente la subimos a 4.6 por ciento, desde el 3.7 por ciento previo", apuntó .
El consenso de analistas consultados por Citibanamex ajustó recientemente su pronóstico de inflación para 2017, de 3.5 a 4 por ciento. Para los servicios el alza fue la más significativa en cerca de dos años, con una variación anual de 2.71 por ciento.
En el agregado, el componente subyacente de la inflación observó el mayor crecimiento en términos anuales en dos años, con una variación de 3.3 por ciento. Por su parte, los precios de bienes agropecuarios subieron 5.27 por ciento anual, las tarifas de energéticos y las autorizadas por el gobierno fueron 1.9 por ciento más grandes.
Con dichos resultados la inflación no subyacente tocó el mayor nivel en nueve meses, con un dato anual de 3.18 por ciento. En tanto, la inflación quincenal resultó de 0.77 por ciento, la más elevada para un mismo periodo en cinco años.
Las tarifas cuya incidencia fue más relevante en la quincena de referencia fueron las de la electricidad, que reportó un crecimiento de más de 25 por ciento en la quincena, las de los servicios turísticos en paquete y las de los boletos de avión, estos últimos con aumentos quincenales de 5.8 y 11.6 por ciento, respectivamente.
Los productos que contuvieron el incremento en los precios fueron el pepino, con un descenso superior a 18 por ciento; los pañales, con una baja de 2.6 por ciento; y la cebolla, con una reducción en el precio de tres por ciento.
PRESIONAN LUZ Y TURISMO
De acuerdo con analistas de Banorte, la inflación en la primera quincena de noviembre fue presionada por las tarifas eléctricas, con el fin de verano en algunas regiones del país.
También influyó en el periodo el incremento que presentaron las tarifas de transporte aéreo y los servicios turísticos, como resultado de las compras adelantadas de vacaciones por el puente del 20 de noviembre.