Mientras el gobierno de Donald Trump se prepara para renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el jefe de la cadena de cine más grande de México asegura que el fin de este tratado lo puede convencer de comprar maíz palomero a Argentina en lugar de Estados Unidos.
Cinépolis de México, la cuarta cadena cinematográfica más grande del mundo, compra alrededor de 10 millones de dólares al año de granos americanos, provenientes de agricultores de Kansas, Missouri y Iowa,
Alejandro Ramírez, el director general de Cinépolis, mencionó que su compañía ya estudió la compra del maíz a Argentina, esto después de la campaña y victoria de Trump, que empujó el peso a máximos históricos frente al dólar.
"Por ahora, Estados Unidos sigue ganando. Pero un impuesto de tan sólo un 2 por ciento podría inclinar la balanza", dijo el empresario.
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Mientras que los fabricantes de autos como General Motors y Toyota Motor han hecho que crezca el disgusto de Trump con el TLCAN, Cinépolis muestra cómo las exportaciones clave de Estados Unidos que no están relacionados con la fabricación podrían convertirse en daños colaterales.
Ramírez, quien encabeza el Consejo Mexicano de Negocios que incluye a las mayores multinacionales del país, dijo que su grupo está trabajando con sus socios comerciales en Estados Unidos para educar a los políticos sobre el valor de la integración económica.
"Muchas de las cadenas de valor son complejas, y nadie le ha dicho eso a la gente. Todos necesitamos trabajar mejor para informar, en el pasado esto no era necesario porque nunca pensamos que el libre comercio se pondría en riesgo", dijo Ramírez en una entrevista telefónica.
Aunque sí se puso en peligro por la elección de Trump, quien prometió terminar o renegociar el TLCAN, el cual describió como el "peor acuerdo comercial" en la historia de Estados Unidos y un desastre para los trabajadores estadounidenses.
México comenzó esta semana 90 días de consultas entre el gobierno y el sector privado para preparar las conversaciones que se espera comiencen en mayo. El presidente, Enrique Peña Nieto, y altos funcionarios han dicho que mantener a Norteamérica como una área libre de aranceles es un objetivo clave.
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Mientras que las compras de Cinépolis sólo representan una pequeña compra para los más de 2 mil millones de dólares en maíz que los Estados Unidos exporta a México anualmente, esto podría sugerir a otros compradores a seguir este ejemplo.
Ramírez, cuyo abuelo inició la cadena cinematográfica hace más de cuatro décadas, dijo que la factura anual de compras en bienes que le hace su empresa a Estados Unidos es de 40 millones de dólares.
Tal cantidad millonaria incluye pantallas, proyectores y 6.5 millones de dólares de queso proveniente de Wisconsin para ponerle a los nachos. En general, Cinépolis, con sede en Morelia, México, tiene cerca de 3 mil 200 salas de cine en México, y mil 700 repartidas en Latinoamérica, Estados Unidos, España y la India.
Cinépolis ha invertido cerca de 140 millones de dólares en Estados Unidos, y México, donde la compañía tiene una participación del 68 por ciento del mercado, sigue siendo por mucho donde basan su mayor presencia.
"En México, cerca del 90 por ciento de las películas mostradas en Cinépolis vienen de Estados Unidos. Somos uno de los grandes clientes de Hollywood", dijo Ramírez.
"Importamos todo nuestro maíz de Estados Unidos para venderlas en nuestras salas de cine, gracias al libre comercio. Si ése no fuera el caso, si regresamos a los niveles arancelarios antes del TLCAN, entonces sería más barato traerlo de Argentina", puntualizó.
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Ramírez duda de que muchos estadounidenses estén familiarizados con el concepto de integración de la cadena de suministro, lo que hace que cada dólar de las exportaciones mexicanas tenga un estimado de 40 centavos de dólares estadounidenses, esto según un documento de la Oficina Nacional de Investigación Económica de 2010.
"Los agricultores estadounidenses podrían no saber cuándo terminan sus productos en México. Sacar este mensaje es ahora la misión de mi grupo, que trabaja con la Cámara de Comercio de Estados Unidos y la Mesa Redonda de Negocios", afirmó Ramírez.
"Hay cosas que podemos encontrar que sean una solución de ganar-ganar. Un automóvil que se ha montado en México realmente no se puede decir que se trata de un automóvil mexicano, sino de un automóvil norteamericano, este tratado de libre comercio ha sido criticado por su competitividad de la región norteamericana en su conjunto", finalizó el empresario mexicano.