Los elevados niveles de informalidad en el país, el outsourcing, el aumento de trabajos freelance y la baja cultura sobre el retiro, harán que en el futuro los millones de jóvenes millennials que apenas tienen unos años trabajando, o que están por incorporarse a la actividad productiva, no cuenten con una pensión para su vejez.
Esto, bajo el actual sistema de pensiones en el país, que requiere de mil 250 semanas de cotización para tener acceso a un ingreso después de la vida laboral.
Federico Rubli, experto en temas de pensiones, recordó que en la reforma del 1997 que dio origen al Sistema Afore de cuentas individuales, se establecieron requisitos para acceder a pensiones demasiado estrictas y difíciles de cumplir en un país como México, con las características de informalidad del mercado de trabajo.
"Me refiero al requisito de cumplir mil 250 semanas de cotización, casi 25 años, mientras que en el sistema anterior el requisito eran 500 semanas. Si se considera una carrera laboral de 40 años, los 25 años de requisito de cotización implican una densidad de cotización de 62.5 por ciento", dijo.
La Consar ha hecho público que la densidad de cotización promedio del sistema es 43 por ciento, es decir lejos del 62.5 por ciento que aplicará para la generación Afore.
De acuerdo con las estadísticas de la Consar, el 69 por ciento del total de cuentas tienen una densidad menor a 65 por ciento, lo que quiere decir es que ese 69 por ciento no va a cumplir con el requisito de alcanzar una pensión, y obtendrán la "negativa de pensión" lo que implica que a la población que se retire se les dará en una sola exhibición los recursos que acumuló en su cuenta de Afore.
"Por eso digo que la situación es grave, porque de seguir como vamos, prácticamente un 70 por ciento no van a alcanzar pensión. Eso es una bomba social", afirmó.
Explicó otra forma de ver lo complicado que es que alcancen una pensión, es por el número de cuentas de trabajadores por estratos de ingreso de salario mínimo. Detalló que estudios revelan que el 86 por ciento de las cuentas de Afores son de trabajadores que perciben de 1 a 4 salarios mínimos, y se prevé que este grupo logrará menos de 25 años de cotización.
SIN CAMBIOS EN PUERTA
José Antonio Meade, titular de la Secretaría de Hacienda, destacó que la reforma que dio origen al Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), que cumple dos décadas, ha permitido un importante desarrollo de los mercados financieros, pero reconoció que debe fortalecerse.
Para ello, dijo, es necesario hacer un análisis integral, que considere el sistema de aportaciones a la cuenta para el retiro y de vivienda. Se debe analizar si la gestión de los recursos se hace de manera que permita elevar el patrimonio para el retiro. Indicó a El Financiero que para una mayor pensión es necesario una mayor tasa de remplazo y de contribución.
Gustavo Leal, catedrático de la Universidad Autónoma Metropolitana, descartó que ante el contexto electoral se dé un cambio para incrementar las aportaciones obligatorias. Consideró que el actual sistema de Afores no es una salida para México, "entre más se tarde en cambiar, más jubilados pobres tendremos", indicó.