Pemex no cumplió con los objetivos operativos planteados en su primer Plan de Negocios que proyectó de 2012 a 2016.
Aunque el entorno, e incluso la estructura de la petrolera han cambiado, en dicho documento, aprobado por el Consejo de Administración en junio de 2010 se estableció que la producción de crudo para este 2016 sería de 2.8 millones de barriles diarios (mbd), pero al cierre de agosto se coloca en un promedio anual de 2.1 mbd.
En cuanto al gas natural, la meta establecida en el documento estratégico era de seis mil 066 millones de pies cúbicos diarios (MMpcd), pero hoy se encuentra en cinco mil 686, mientras que la elaboración de productos petrolíferos debería estar en 1.690 mbd, pero se encuentra 29 por ciento por debajo, en 1.200 mbd.
Por otra parte, deberíamos importar 36 por ciento de las gasolinas que consumimos, sin embargo, hoy la cifra es de 63 por ciento.
UN NUEVO CONTEXTO
Es cierto que entre 2012 y 2016 el precio internacional del petróleo se cayó, se instaló una nueva administración y hasta nueva reforma energética fue promulgada, pero no hubo un solo indicador establecido en el primer plan de cuatro años de la petrolera que se cumpliera.
Jorge Piñón, director interino del Centro Internacional de Energía y Política Ambiental de la Universidad de Texas en Austin, señaló que se deben conceder en el análisis de las cifras todos los procesos por los que pasó la petrolera, tanto internos como externos.
"No es justo la paliza que Pemex recibe en cuanto a su gestión, cuando no reconocemos las difíciles circunstancias financieras, operativas y económicas que la empresa enfrenta, y más importante aún el proceso de Reingeniería Corporativa y Transformación Organizacional que está en proceso para su transformación, cambio de paradigmas, cultura, nuevos y mejoramiento de procesos organizacionales y otras estrategias claves", indicó.
De cara a la presentación del nuevo Plan 2017-2021 el próximo jueves 3 de noviembre, expertos advierten que el reto en este documento es muy alto.
Para José Balmori, director de la Licenciatura en la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Anáhuac México, la dirección general y el Consejo de Pemex deben ser muy cuidadoso en cómo plantear el nuevo plan.
"Dada la situación que está viviendo el mundo en cuanto al petróleo y la situación particular de Pemex, tienen que ser muy racionales y muy cuidadoso en cómo van a plantear el Plan de Negocios, sobre todo que ya implementaron un Gobierno Corporativo y que se viene competencia de otros jugadores que antes no estaban en el sector energético en México", advirtió Balmori.
Agregó que "tienen que tener una estrategia que sustente cada uno de los planes e inversiones que va a hacer Pemex...su realidad es de una empresa en el sector energético, de todo el mundo, que más apalancamiento tiene, sus razones financieras ya empiezan a prender focos".
TACHE A OTRAS PETROLERAS
Pemex no es la única empresa que ha faltado a sus promesas y metas ante el cambiante entorno internacional.
Chevron, por ejemplo, una de las mayores petroleras del mundo, planeó en 2012 tener una producción de 3.3 millones de barriles diarios para el cierre de este año.
Sin embargo, su producción al cierre del segundo trimestre de 2016 alcanzó un promedio de 2.6 millones de barriles de crudo.
A mitad de año, Chevron señaló que asuntos de seguridad en Nigeria y un incendio en Canadá les impidieron alcanzar sus metas.
Hacia adelante, Pemex deberá enfocar su nuevo plan estratégico hacia sus negocios más rentables, dijo Alejandra León, analista de IHS Energy.
"En su nuevo plan va a evaluar refinación, gas, petroquímica y va a quedarse con los negocios más rentables o verá la forma de hacerlos más rentables", adelantó la especialista.
Para Miriam Grunstein, de la Rice University, la petrolera debe poner mayor énfasis en la exploración, que hoy tiene abandonada, lo que pone en peligro su futuro en la industria.