La escasa temporada de lluvias se convertirá en ‘el fantasma de las navidades futuras’, pues en el municipio de Xonacatlán, uno de los mayores productores de árboles de Navidad en el Estado de México, la cosecha mermó entre el 50 y 60 por ciento de la plantación en renuevo, lo que repercutirá en los ocho años siguientes.
Productores del poblado de Santiago Tejocotillos apuntan que son pocos quienes cuentan con sistema de riego y, por el cambio climático, las lluvias torrenciales son pocas en esta parte norte de la entidad mexiquense.
Aunque las condiciones para las lluvias en los próximos años no son alentadoras, el campesino Alejandro Gutiérrez señala que ellos pondrán todo su esfuerzo para obtener buenas cosechas futuras.
“Anteriormente se nos lograba el 90 por ciento, el 95 por ciento, ahorita se nos está logrando el 40, 50 por ciento, sí ya nos están pegando las sequías. No hubo lluvias como en otros años, no tenemos sistema de riego, no tenemos de que otra forma ayudarnos”, manifestó preocupado el lugareño.
En la región montañosa de Xonacatlán, algunos productores de arbolitos de Navidad utilizan la técnica del chaponeo, que consiste en hacer ollas de captación de agua de lluvia o instalan cisternas; sin embargo, el recurso natural captado solo alcanza para 15 días y la temporada de estiaje está cerca.
“Se pierde dinero y tiempo, este es un año de retraso, pues cada arbolito que se siembra lleva ocho o nueve años para estar listo, son gastos que se generan. No tenemos un seguro como tal, no tenemos alguien que nos apoye, a echarle ganas y juntar de nuevo para el año que viene y plantar de nuevo”, agregó Alejandro Gutiérrez en las inmediaciones de su plantación, donde se dan árboles de las clases ocote y oyamel.
El productor Rodolfo Alvarado señaló que la pasada temporada de lluvias fue irregular y aunque en ocasiones llovió mucho en la zona alta de Xonacatlán, las precipitaciones no se prolongaron por semanas, lo que habría hecho mucho bien a los plantíos.
“Yo creo que por septiembre se fue el temporal, cuando en otros años por ahí de septiembre y parte de octubre el agua pues es la que mantiene los árboles o las plantaciones en buenas condiciones y pues el cambio climático es lo más difícil por no cuidar el medio ambiente”, expresó.
Alejandro Gutiérrez y Rodolfo Alvarado piden a los gobiernos federal y estatal plantaciones nuevas, pero también un seguro para sus parcelas y la introducción de sistemas de riego, pues las lluvias han sido insuficientes para que los arbolitos de Navidad se desarrollen como en años anteriores.
Entre los beneficios de tener sus cultivos está la captación de agua de lluvia para el subsuelo, se genera oxígeno en la región norte del Estado de México, hay captación de carbón y se evita la erosión del suelo.
Informes de los comuneros de Xonacatlán indican que existen 157 hectáreas para la plantación de árboles de Navidad, mientras que, por cada ejemplar cortado éste se repone enseguida y tarda entre seis y ocho años para ser talado y vendido para adornar las fiestas decembrinas.
¿En qué otros municipios se consiguen árboles de Navidad?
En esta temporada decembrina también se hizo el corte en plantaciones de Amecameca y Tlalmanalco, en la región de los volcanes, así como en Xonacatlán, Almoloya de Juárez y Valle de Bravo, en el Valle de Toluca y Villa del Carbón, que colinda con el estado de Hidalgo. En estos lugares predominan los árboles de clase ocote, oyamel, pino blanco (Pinus Ayacahuite) y Abeto Douglas Canadiense (Pseudotsuga menziesii).