La 27ª Conferencia sobre el Cambio Climático (COP 27) situó a la crisis por escasez de agua como uno de los mayores riesgos a nivel global, ya que el cambio climático ha provocado alteraciones significativas en el ciclo global del agua, lo que hace que los recursos hídricos sean más escasos debido a las sequías y la rápida evaporación.
“Para garantizar un futuro sin sequía y estrés hídrico, las empresas deben empezar a cuidar el agua, que es un elemento que brinda a la humanidad energía, seguridad alimentaria, salud e incluso una economía estable. Debemos cambiar nuestros comportamientos, actitudes, acciones, nuestra gobernanza y la forma en que nos organizamos en torno al agua”, dijo Diego Araque, director de Marketing y Comunicación de Veolia, firma especializada en gestión del agua.
Según datos de Veolia Water Technologies & Solutions, en México, 85 por ciento del territorio nacional tiene algún nivel de escasez hídrica y de este porcentaje, un 25 por ciento tiene niveles de sequía extrema.
“Se espera que para 2023, los estados del norte del país como Mexicali, Sonora, Durango, Zacatecas, Chihuahua o Monterrey tengan temperaturas de hasta 52 grados y niveles de sequía extremos, esos estados se enfrentarán a un importante reto por la escasez de agua”, comentó Juan Pablo Rodríguez, director Comercial de Veolia.
Explicó que las industrias de México tendrán un reto importante para 2023 porque la Ley de Aguas Nacionales las obligará a modernizar los sistemas de tratamiento y reúso de agua, así como establecer acciones para combatir el estrés hídrico en el que se encuentra gran parte del territorio nacional.
“Hasta ahora, las empresas no están obligadas a tratar el agua en su totalidad, pero con la nueva Ley, deberán hacerlo en su totalidad para que posteriormente pueda ser utilizada en otras actividades sin que exista el riesgo de que tenga contaminantes nocivos para la salud de las personas”, detalló
En tanto, Diego Araque afirmó que es urgente que las empresas apliquen las normas que se establecen en la nueva Ley de Aguas Nacionales o de lo contrario, el estrés hídrico en el país incrementará drásticamente.
“Si no se fomenta el uso responsable del agua a nivel empresarial, el estrés hídrico al que estará sometido el territorio nacional podría llegar a ser de hasta un 97 por ciento en 2023″, sentenció Araque.
Afirmó que, si bien las empresas deberán destinar inversiones millonarias para el tratamiento y reutilización del agua, se verá compensado con el crecimiento de su producción, ya que la escasez del vital líquido puede reducir la capacidad productiva de toda una industria.
“Es importante que la ley se aplique en tiempo y forma para evitar mayor estrés hídrico. Las empresas no deben ver esto como un gasto, sino como una inversión a futuro que hará más rentable su negocio”, expresó el directivo de Veolia.