El desabasto mundial de semiconductores, conocidos como chips, así como el incremento del precio del acero cuyo costo se ha triplicado en los últimos 12 meses, impactó a productores de electrodomésticos que se encarecieron hasta en 38 por ciento, casi cuatro veces más que la inflación general del país que fue de 5.89 por ciento a mayo.
La industria del acero está en auge a medida que la economía mundial se recupera de la pandemia, y todos, desde constructores de viviendas, las armadoras automotrices y hasta los fabricantes de electrodomésticos, siente los efectos dominó.
Los fabricantes como Mabe, Samsung y el productor mexicano de parrillas, campanas y hornos SUPRA, afirman que el incremento en la demanda de estos productos a causa de la pandemia de coronavirus ayudó a mitigar un poco el mayor costo de producción, pero esto no ha sido suficiente, por lo que han tenido que reflejar el alza en el precio al consumidor.
“El precio de los insumos como aceros, cobre, aluminio, también de elementos electrónicos (semiconductores) se están incrementando a niveles de máximos históricos y esto al final se refleja en los clientes. Ahora tenemos un volumen muy alto en la demanda que permite absorber parte de estos incrementos en precios y quitamos todas las promociones para promover la rotación de productos”, comentó José Calvillo, director de finanzas de Mabe durante su participación en el foro Fitch Ratings en México.
Explicó que esperan seguir teniendo problemas con el abasto de estos insumos en lo que resta del año.
Bernardo Vallejo, director general de SUPRA, el fabricante nacional de parrillas, hornos y campanas, explicó que incrementaron los precios de sus productos, además de que han tenido paros técnicos que retrasan la producción y entrega a tiendas generado multas, pese a que han procurado absorber el costo elevado de su materia prima, el acero.
“A pesar del reto al que nos hemos enfrentado desde hace más de un año por el incremento de insumos para nuestros productos como el acero, nuestras ventas se han incrementado y migrado del piso de venta a e-commerce debido al confinamiento; nuestras parrillas de inducción por ejemplo se han posicionado como un producto tendencia por el ahorro en el gas y la seguridad que brindan al cocinar”, dijo Vallejo en un comunicado reciente.
Agregó que, además del acero, los materiales nacionales que han incrementado su costo son el alambrón y la lámina, esenciales para la fabricación de electrodomésticos y destacó que en el caso del material importado el costo del contenedor se ha triplicado.
Samsung, por ejemplo, ha tenido problemas con el abasto de semiconductores lo cual limita su capacidad productiva.
“La volatilidad actual del mercado de semiconductores se siente en toda la industria de la tecnología y más allá. En Samsung, estamos haciendo nuestros mejores esfuerzos para mitigar el impacto y continuaremos trabajando diligentemente con nuestros socios para superar los desafíos de suministro”, respondió la empresa a El Financiero en un correo electrónico.
Sobre otros productos hechos en el país, Betsabé Rocha, directora del Clúster de Electrodomésticos (Clelac) de Nuevo León señaló que sus socios han manifestado que, a fin de abastecer la demanda, han tenido que comprar los semiconductores a un costo mucho más alto de lo habitual para cumplir con los pedidos.
Refrigeradores, con demanda ‘on fire’
La demanda de los refrigeradores, a pesar del encarecimiento, se encuentra on fire, principalmente en el mercado de exportación como Estados Unidos, con quien México alcanzó el mayor valor de envíos desde que se tiene registro.
En el primer trimestre de este año se enviaron al extranjero un millón 788 mil 190 unidades, un alza de 41.5 por ciento anual, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía. Mientras que en valor el alza fue de 36.7 por ciento al alcanzar los 888 millones de dólares. En ambos casos las cifras más altas desde que tiene registro la autoridad.
Al respecto, José Calvillo de Mabe explicó que el año pasado la pandemia elevó la demanda de electrodomésticos en Estados Unidos, mercado donde con ayuda del gobierno se vieron en la posibilidad de mejorar sus hogares.
“Estamos a 100 por ciento de nuestra capacidad e incluso con problemas en nuestra cadena de suministro porque otros países no se recuperan de la pandemia (…) Estamos previendo que esta demanda altísima seguirá este año y se irá diluyendo hasta 2022. Esto será mejor mientras el ritmo de la economía vaya recuperándose”, destacó.