Crédito Real SAB dijo haber llegado a un acuerdo con “varios” acreedores sobre la liquidación de sus pasivos, lo que sería un avance en lo que se ha convertido en una larga saga de impago y quiebra para el prestamista de nómina mexicano.
Las negociaciones continuaron con aquellos que aún no han sido pagados, dijo la compañía este martes en un comunicado. Los bonos en dólares de Crédito Real con vencimiento en 2023 extendieron su caída y cotizaron en alrededor de 3.4 centavos de dólar, según datos de precios compilados por Bloomberg.
El anuncio se produce después de que el prestamista no bancario más grande de México, Unifin Financiera SAB, dijera que detendría los pagos de bonos a medida que avanza para reestructurar su deuda.
Crédito Real está programado para comparecer ante el tribunal de quiebras a las 2 pm en Delaware.
Crédito Real pidió protección de EU
En julio pasado el prestamista no bancario Real SAB dijo que un tribunal mexicano ordenó su liquidación, y horas después se acogió al Capítulo 15 de la ley de quiebras de Delaware, una medida que protege sus activos estadounidenses durante el proceso en México.
La orden de liquidación se produjo tras una acción legal de un accionista, y se ha designado un liquidador judicial, quien ha asumido el cargo y se encuentra desempeñándolo, según un documento presentado el jueves en México. Es el impacto más reciente en una saga retorcida para la empresa mexicana, cuyo derrumbe se vio exacerbado por el impago de un bono en francos suizos a principios de este año.
Apenas el mes pasado, algunos acreedores intentaron obligar a Crédito Real a declararse en quiebra en Estados Unidos. La fecha límite para que la empresa responda a esa petición de quiebra involuntaria es el jueves, y Crédito Real dijo en documentos judiciales estadounidenses que tiene la intención de que se desestime ese caso.
El proceso de liquidación en México comenzó el 30 de junio, y Fernando Alonso-de-Florida Rivero fue nombrado liquidador, según la solicitud de quiebra.
Crédito Real anteriormente puso fin a su acuerdo contractual con asesores legales y financieros que estaban preparando el proceso de quiebra bajo el Capítulo 11 en EE.UU., diciendo que la medida era lo mejor para la empresa y que todavía estaba tratando de reestructurar sus deudas . La empresa había estado buscando financiación de los acreedores existentes para ayudar a financiar el proceso de quiebra, según informó Bloomberg.