La rápida evolución de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC’S) ha demandado más atención en las empresas para enfrentar fake news, manejo de crisis, hackeos y un sin número de riesgos digitales, sin embargo, todavía el 45 por ciento de las empresas no saben cómo enfrentar estos problemas.
“Ese es uno de los grandes retos de las empresas en México y el mundo, saber manejar su reputación online, todavía falta mucho por hacer en política de comunicación de las empresas”, señaló Mariela Pérez Chavarría, investigadora del Tecnológico de Monterrey.
De acuerdo con el estudio “Gestión de la reputación corporativa en México”, aunque el 90 por ciento de las empresas encuestadas consideran que la reputación corporativa es un activo de máxima prioridad, el 40 por ciento desconoce indicadores para medir la reputación y un 30 por ciento carece de una clara estrategia de reputación.
Asimismo, se estima que el 40 por ciento de los empresarios ignoran los beneficios que atrae una buena reputación, como lo sería una mayor atracción y retención de talento, además de una diferenciación en el mercado que es imposible de copiar. Tener una buena imagen ante la sociedad también aminora los efectos de una crisis.
La pandemia también provocó que el 78 por ciento de las empresas se ‘humanizaran’ y le dieran más importancia a su reputación, ya sea mediante la construcción de mensajes y narrativas de cambio y resiliencia, mayor uso de la tecnología entre empleados y el desarrollo de nuevos canales de comunicación.
Los mayores responsables de la reputación corporativa suelen ser los CEO’S de las empresas, ya que son decisivos y comprometidos, sin embargo, solo un 74 por ciento de los encuestados afirmó ver activos y comprometidos a los CEO’S con la comunidad.
“La reputación es un intangible dinámico en permanente evolución, se vuelve tangible en las acciones y la conducta de las empresas, pero debe vivir más en las acciones cotidianas de las compañías, más que en sus esfuerzos por solo verse bien”, indicó la académica responsable del estudio.
Como recomendación, la especialista recomendó a las empresas seguir las ‘cinco C’, que se refiere a trabajar en la credibilidad, congruencia, confianza, claridad y una comunicación integral.