Altos Hornos de México (AHMSA) suspendió el suministro de gas en su planta Coquizadora y en el Alto Horno 5 derivado de un ajuste en su plan de negocios establecido para el reinicio de operaciones en líneas de producción.
“El apagado de las estufas y enfriamiento controlado del Alto Horno 5 es una decisión adoptada por el cuerpo técnico que se ajusta al plan de negociaciones establecido para el reinicio de la producción, y no tendrá impacto alguno en las operaciones futuras de la unidad”, informó la compañía.
El programa de trabajo para la reactivación contempla iniciar operaciones con el Alto Horno 6, el cual ya está preparado y se le dio mantenimiento desde hace ya varios meses, para que pudiese cumplir con el esquema de arranque.
“La capacidad que tiene el Alto Horno 6 es suficiente para la producción inicialmente requerida”, detalló la compañía que recientemente recibió una inyección de capital de la estadounidense Argentem Creek Partners, para reactivar la producción de acero.
En este contexto, AHMSA informó que no tiene sentido seguir alimentando el Alto Horno 5 con gas licuado de petróleo, pues sólo será encendido cuando los volúmenes de acero, así lo ameriten.
Por su parte, el líder del Sindicato Democrático, Ismael Leija Escalante pidió a los trabajadores no preocuparse porque la empresa va a trabajar con quien esté al frente.
“Los trabajadores no deben estar preocupados, la empresa va a trabajar con quien esté al frente; hay que dejarnos de politiquerías y estar todos unidos para exigir que ya inicie la producción”, dijo.
Aunque AHMSA ha saldado parte de la deuda de 178 millones de pesos con la CFE, así como parte de los pasivos que enfrenta, por alrededor de 400 millones de pesos, con Pemex, los trabajadores permanecen en incertidumbre, pues no los han llamado para reincorporarse a su actividades.
Hace un mes, AHMSA había citado a los empleados para que comenzaran ya a laborar en las plantas 1 y 2, tras la reconexión de la energía eléctrica y el restablecimiento del servicio de gas, sin embargo, ahora se presenta una nueva desconexión que para algunos trabajadores de la siderúrgica es una nueva señal de que no han podido avanzar con su deuda que tiene con la Comisión.