El autotransporte de carga de mercancías en México tiene potencial para expandirse con el uso de tecnología e Inteligencia Artificial, señalaron directivos de BeGo, la plataforma que busca conectar bienes y personas.
Iván Cárdenas, director general de BeGo dijo en entrevista que el principal reto para capitalizar el nearshoring, además de la apuesta a la tecnología, es apostar por el hombre-camión o los operadores del autotransporte, pues a la fecha se ha podido ayudar a reducir hasta en un 14 por ciento los regresos vacíos de sus trayectos con la digitalización.
Agregó que aún falta mucho mercado por atender que se puede capitalizar a través de la plataforma, que recientemente lanzó una serie de productos financieros y tecnológicos para los operadores del autotransporte y empresas.
“A través de nuestra plataforma han pasado más de 10 mil millones de dólares en valor de carga, esto si lo comparas con el valor de la industria, todavía tenemos un largo camino que recorrer. Más o menos en México se mueven 590 billones de dólares en importación y 600 billones en exportación, todavía tenemos ‘colchón’ para crecer”, dijo.
Destacó que México vive “el segundo milagro mexicano” con el nearshoring, por lo que es importante impulsar la tecnología en la industria.
“Existe relocalización (de empresas) y también existe relocalización de compañías extranjeras en lugares nuevos en México que necesitan desarrollar la cadena de suministro del transporte, eso ha sido un reto importante, porque en el sur del país no hay mucho transporte y tenemos que llevar o crear nuevas empresas del transporte”, agregó el empresario.
Destacó además que el desarrollo de polos y proyectos de infraestructura para el nearshoring puede ser potencialmente un nuevo mercado, como el sureste y el Istmo de Tehuantepec. “Para nosotros todo lo que sea alta densidad de carga nos atrae y creemos que eso bien ejecutado puede ser un proyecto que defina los siguientes 50 años del país”, dijo.
Agregó que con la tecnología se ha podido además mejorar la operación de los transportistas, evitando multas por hasta 3 millones de pesos por temas relacionados a la Carta Porte y reducir algunos procesos administrativos para mover carga de días a segundos.