Un anuncio en Facebook llama la atención de Víctor García, que suele estar atento a las promociones de las aerolíneas. Se trata de descuentos de hasta el 80 por ciento. En la imagen hay un avión de Volaris y un enlace a una página que decide abrir.
La página lo redirige a un número de WhatsApp-52 133 1324 5533 que se anuncia como una cuenta de empresa: Volaris. El chat falso de la aerolínea se activa con un enlace directo y, en menos de un par de minutos, un “agente” de Volaris atiende la reserva.
El Financiero cotizó con la aerolínea que suplanta la información de la empresa dirigida por Enrique Beltranena. Los estafadores brindan una cotización que ofrece un viaje redondo por apenas el 25 por ciento del costo real y, además, incluyen beneficios como la selección de asiento, TUA y maleta documentada sin costo adicional.
Mientras que el costo del boleto de avión en la ruta CDMX-Cozumel es de 6 mil 340 pesos, para una semana en octubre, los estafadores la ofrecen por 2 mil pesos, ambos en vuelo redondo.
Los estafadores presentan un identificador de una trabajadora de Volaris, con una clave de la empresa y una fotografía que simula ser de la aerolínea. Además, una imagen falsa que simula la selección de los asientos. Incluso, la falsificadora de la aerolínea otorga una imagen con el presunto código de reserva, e indica que se tiene que pagar 8 mil pesos por las reservas para cuatro personas en dos exhibiciones: una de 3 mil y otra de 5 mil pesos a la cuenta: 2242-1703-2059-5135.
“Para poder validar y concretar su reservación de forma rápida y segura deberá realizar su depósito de manera manual en un lapso no mayor a una hora”, indican los estafadores.
El Financiero reportó el caso a Volaris, que realizó un seguimiento para denunciar la suplantación del perfil ante Meta. No obstante, el número telefónico y el servicio de WhatsApp no pudo ser suspendido, explicó la aerolínea.
La semana pasada, Volaris y Viva Aerobus anunciaron una alianza para evitar los fraudes cometidos contra los pasajeros, un problema en ascenso en las transacciones en línea.
Tanto Viva Aerobus como Volaris han notado un fuerte aumento en las quejas por fraude cometido contra sus pasajeros, quienes son engañados por suplantadores de ambas empresas y que ofrecen boletos de avión a través de páginas de internet de las propias aerolíneas y de agencias de viaje fraudulentas.
De acuerdo con datos de la Procuraduría Federal de Defensa del Consumidor (Profeco), el aumento de fraudes contra pasajeros de aerolíneas aumenta alrededor del 50 por ciento en temporadas de alta demanda, como las vacaciones de verano y el periodo decembrino.
Aunque todos los destinos son propensos a ser utilizados como “anzuelos”, las aerolíneas han identificado que las playas son los puntos con mayor cantidad de reportes.
Para Volaris el 42 por ciento de las quejas recibidas están relacionadas con algún tipo de fraude, explicó en conferencia el director general de la aerolínea, Enrique Beltranena.
En tanto, Juan Carlos Zuazua, director general de Viva Aerobus, indicó que se busca proteger a los clientes para evitar que caigan en una estafa y que, además, sus datos puedan ser utilizados para otros fines.
“El fraude electrónico, muy común en la industria de viajes, es algo que nos preocupa porque vemos todos los días que nuestros clientes son víctimas”, remarcó Zuazua en conferencia.
¿Cómo evitar comprar boletos de avión falsos?
Para evitar los fraudes, las aerolíneas pidieron a los pasajeros que solo compren boletos de avión en sitios de internet verificados, en las respectivas aplicaciones móviles de las empresas y en distribuidores autorizados.
Los pasajeros también podrán contactar a las empresas en sus perfiles verificados de las diferentes redes sociales, así como denunciar sitios fraudulentos que suplantan la identidad de Viva Aerobus y Volaris.
Pese a que las aerolíneas son las que son suplantadas en su identidad, dado que el fraude se comete contra los pasajeros, ellos son quienes deben informar a la autoridad, ya sea a la Policía Cibernética o a la Profeco para buscar algún mecanismo para eliminar los anuncios fraudulentos.
No obstante, es muy poco probable que los pasajeros estafados puedan recuperar sus recursos.
El fraude en América Latina relacionada con la falsificación de boletos y la compra de estos con tarjetas de crédito robadas tiene un valor de pérdida para las aerolíneas de mil 400 millones de dólares, esto de acuerdo con datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés).