Alrededor del 25 por ciento de los autos que circulan en los estados que conforman la Megalópolis podrían renovarse con los cambios al programa "Hoy No Circula", lo que equivale a un millón 250 mil unidades de 5 millones que hay como parque vehicular en la zona del Valle de México.
En entrevista, Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), dijo que los ajustes al "Hoy No Circula" no necesariamente serían un factor fuerte que incida en las ventas de autos nuevos, aunque sí buscan que se cambien los vehículos viejos por modelos más modernos que tengan Sistema de Diagnóstico Abordo (OBD, por sus siglas en inglés).
"Se puede considerar que es una promoción para la renovación vehicular dándole beneficio a un auto nuevo, es lo que esperamos que pueda promover: mayores ventas en la megalópolis", dijo el representante industrial.
El OBD que tienen los autos de 2016 en adelante, es la computadora con la cual se verificarán los vehículos de tal manera que se pueda comprobar si todos sus sistemas están funcionando bien y con ello, conocer si están contaminando menos.
"Recomiendo que las personas revisen su sistema, porque si van y no pasan la verificación, el verificentro les dará 15 días para reparar los problemas y volver a pasar o de lo contrario, no podrán verificar", sugirió Solís.
Destacó que la AMIA está satisfecha tras el trabajo realizado por las autoridades federal y estatal con los cambios a un programa que se aplicará a partir del 1 de julio y hasta que termine el año.
"Esto es un ensayo para conocer temas que podemos mejorar o debemos cambiar respecto a lo que se trabajó..., estaremos en comunicación con las autoridad para seguir participando en el diálogo de los cambios al programa", dijo el presidente de AMIA.
Entre los ajustes al programa está el que los vehículos nuevos, años 2016 y posteriores, queden exentos de la verificación vehicular obligatoria hasta por cuatro años a partir de su adquisición.
También que las unidades a gasolina o gas natural 2006 y posteriores que carezcan de los conectores necesarios para realizar la verificación vehicular, como ahora se exige, puedan realizar de manera excepcional una prueba dinámica con límites máximos permisibles.