Existen cintas de terror que son clásicas del cine contemporáneo. En los últimos años títulos como “Anabelle”, “It”, “La Monja”, “Saw”, “El Aro” o “El Conjuro” han cobrado importancia dentro de este género y recaudado muchos millones de dólares.
Una de las más populares, “The Conjuring” (El Conjuro en español), tiene una historia basada en un caso real, que habría tenido lugar en una granja, en donde una familia empieza a ser testigo de fenómenos paranormales.
La casa que se encuentra dentro de esta granja es la que dio vida y sobre la cual está inspirada esta cinta de 2013; ubicada en el 1677 Round Top Road, en la ciudad de Burrillville, y construida en 1836, acaba de ser puesta en venta por 1.2 millones de dólares, según informó The Wall Street Journal.
Jenn y Cory Heinzen, dueños de esta granja de catorce habitaciones y aproximadamente 3,100 pies cuadrados, dicen que ellos mismos han experimentado situaciones fuera de lo común, como apariciones. Se dice que todo esto sucede por la presencia de Bathsheba Sherman, quien en el siglo XIX vivía en la casa, que ha inspirado decenas de libros y películas.
De acuerdo con The Wall Street Journal, en 2019, cuando los Heinzen compraron la casa, inicialmente se quedaron en una habitación de la planta baja, durmiendo en catres durante los primeros cuatro meses. Además de estar asustado, dice Heinzen, “fue una señal de respeto por los espíritus, dejar que se acostumbraran a nosotros en lugar de irrumpir”. Efectivamente, dice que una aparición negra de cuerpo completo apareció en la puerta para mirarlos, pero les dio una vibra más curiosa que malévola. “Una vez que nos dimos cuenta de que ambos estábamos despiertos y ambos lo vimos, desapareció”, recuerda Heinzen. Desde entonces, la pareja dice que se han conectado muchas veces con los espíritus de la casa.
Actualmente rentan la propiedad por noches para que investigadores y curiosos de lo paranormal tengan la oportunidad de vivir la experiencia y conocer más acerca del inmueble, pero como buscan jubilarse pretenden venderla. Consideran que, para el futuro o fura comprador, podría servir como un gran negocio más que como un sitio para vivir.