En la Ciudad de México podemos disfrutar de un poco de la cultura china a través del Barrio Chino, ubicado en la calle Dolores en el Centro, el cual fue inaugurado en la década de los sesentas después de la llegada de inmigrantes sobre todo a la zona norte de México.
Aunque existen sus propias versiones en distintas latitudes del mundo, se considera al ubicado cerca de la Alameda Central como el más pequeño del mundo ya que congrega restaurantes y tiendas en solamente una cuadra.
Los inicios de la comunidad en México
Entre los años 1880 y 1910 miles de ciudadanos chinos comenzaron a emigrar estableciendo la mayor comunidad en la capital mexicana en 1930. Sus arraigadas tradiciones trajeron consigo una calle rodeada de adornos que formaron parte de festividades como el Año Nuevo Chino que el día de hoy da la bienvenida al tigre.
Aunque en sus inicios las familias se dedicaron a actividades como lavanderías y cafeterías, fue gracias a los cafés que los comerciantes se reunieron con éxito. La llegada del restaurante Shanghai, que actualmente cerró sus puertas, fue el parteaguas que trajo la atención hacia comida como los panes al vapor, los helados, los bisquets, el arroz frito y los rollos primavera.
Barrio Chino de la CDMX
Ocho metros cubren al imponente arco, donado para el inicio de su remodelación en dos bloques en el 2008 por la República Popular de China, que fue construido con material de acero reforzado con cerámica, granito y mármol. Frente a él lo salvaguardan las estatuas de dos perros Fu, que son un amuleto para la protección.
A él se suma el llamado Arco de la Amistad, que es el más viejo ya que consta del año 1992. Con sus 10 metros está forjado en mármol y piedra y es el más antiguo adornado con un dragón con cola de pescado. Coloridas figuras de papel cuelgan en las alturas entre las que no pueden faltar las clásicas y brillantes esferas que las acompañan en color rojo.
Las monedas chinas que representan la abundancia, los budas para los más religiosos o los gatos en color dorado que son amuletos para la buena fortuna en los negocios es parte de lo que puedes encontrar en sus locales.
En 2018 el espacio sufrió de una nueva remodelación que incluyó un nuevo corredor, luminarias, pisos, jardineras o la rehabilitación del parque Santos Degollado. La comunidad utiliza las banquetas para expandirse y reunir a cientos de transeúntes diariamente entre las 10 y cercanas las 8 de la noche.