La Navidad es una de las épocas favoritas de millones de personas; sin embargo, otra parte de la población en el mundo es antipática a la época; comúnmente se les dice que son ‘Grinchs’; seguramente has escuchado esta palabra al menos una vez.
El ‘Grinch’ es un personaje ficticio que se atañe a la publicación de una historia escrita por Theodor Seuss Geisel, mejor conocido como Dr. Seuss, que está relacionada con las fiestas decembrinas, aunque no es la más amigable; de ahí que se le relacione con las personas apáticas de la Navidad.
¿De qué trata el ‘Grinch’?
En 1957, Dr. Seuss publicó un libro llamado ¡Cómo el Grinch robó la Navidad!, que narra la historia de un personaje con rasgos felinos y de personalidad ‘gruñona’ que está vestido de Santa Claus, pero es todo lo contrario al bonachón personaje, ícono de la Navidad.
Se dice que este personaje, que habita en una cueva a las afueras de Villaquién con su perro Max, tiene un corazón ‘dos tallas más chico’, de ahí que sea menos sensible y odie todo aquello relacionado con las fiestas decembrinas, como las luces, los regalos y básicamente la felicidad de los demás.
Después de pasar varios años ‘robándose la Navidad’, harto de todo lo que implicaba, decidió ceder ante los Quién, habitantes del pueblo, y comenzar a compartir con ellos los últimos días del año.
La historia detrás del ‘Grinch’
La historia tiene un trasfondo que implica una crítica social al consumismo de las fechas decembrinas, que tiene que ver precisamente con los regalos, el estrenar ropa y las grandes cantidades de comida que se elaboran para toda la familia.
El personaje hace referencia, además, a la preocupación por sí mismo nada más, alejado completamente del mundo donde viven las personas.
De acuerdo con declaraciones hechas por Dr. Seuss en una entrevista ofrecida en 1957, el escritor señaló que la historia surgió en un momento de su vida donde pasaba por algunos problemas personales.
“Me estaba lavando los dientes en la mañana del 26 de diciembre -de 1956- cuando noté un rostro muy parecido al del ‘Grinch’ en el espejo (...) Me di cuenta de que algo había salido mal con la Navidad, o más probablemente conmigo. Así que escribí una historia sobre mi agrio amigo el ‘Grinch’, para ver si podría redescubrir algo de la Navidad que yo obviamente había perdido”, expresó en aquel entonces.